¿Y la anchoveta creció? No…lo que crece es la campaña anti industria

Autor: Francisco J. Miranda Avalos, Presidente de la J. Directiva de la ONG Oannes

jueves 11 de enero de 2018

Alimentar desconfianza, sembrar temor, desacreditar científicos e instituciones científicas que todo el mundo reconoce, soltar mentiras o medias verdades, es lo que vemos en los medios respecto al sector pesquero en los últimos meses y días. Pero ¿quién esta atrás de todo esto?


Conversando con diversos miembros de nuestro foro, todos actores del sector pesca y acuicultura, es posible plantear algunas hipótesis.

 

La primera hipótesis, es Sendero Luminoso, sus organizaciones y agentes de fachada. Quienes sostienen esta hipótesis, aducen que algunas organizaciones sindicales o gremiales de pescadores han sido infiltradas por Sendero, dentro del marco de una nueva estrategia que mantiene cierta lógica ya conocida. En los 70s Sendero ataco fundamentalmente a ElectroPerú, ya que con un sistema de recaudación de impuestos ineficiente, el presupuesto del estado se mantenía con las utilidades de sus empresas estatales, donde ElectroPerú era la “joya de la corona”.

 

Tácticamente ElectroPerú era un objetivo muy redituable, sus torres de conexión eléctrica estaban en lugares solitarios y sin protección, y la red eléctrica interconectada hacia que al dinamitar una torre una gran área del territorio se quedara sin electricidad, favoreciendo el actuar de células terroristas en la oscuridad, sembrando el pánico en la población y paralizando la industria nacional con las subsecuentes consecuencias económicas.

 

Hoy Sendero Luminoso, habría cambiado sus tácticas pero no su estrategia, ya no existen empresas estatales, el estado recauda impuestos gracias a una SUNAT eficiente, por lo que sus organizaciones o agentes de fachada, han logrado infiltrarse entre diversos gremios y sindicatos, como los de maestros, mineros, agrícolas y por supuesto la pesca.

 

Dentro de este marco, la obtención de parte de los CTS, y otros salarios extras que se puedan obtener presionando a las empresas pesqueras, ponen en el bolsillo de los agremiados dinero fácil que tiene un impacto positivo en ellos, y que por supuesto levanta la imagen del dirigente que lo obtiene. Retroalimentado la infiltración ideológica.

 

Otra hipótesis interesante, es la concertación de diversos agentes económicos que buscan quitarle el valor a algunas empresas pesqueras, con el objetivo de adquirirlas a bajos precios. Algunos actores incluso aseguran que grupos Chinos, están detrás de ello y que esto comenzó desde los primeros años del gobierno de Humala. Tanto así, que ha sido precisamente el periodo de este gobernante, el que mas ha perjudicado el desarrollo del sector pesquero industrial.

 

La lógica de esta hipótesis se sustentaría en la permanente negación por parte del estado a permitir que empresas pesqueras dedicadas al Consumo Humano Indirecto (CHI - producción de harina y aceite de pescado), puedan procesar anchoveta para Consumo Humano Directo (CHD) de sus propios barcos y de su propia cuota. Algo que aquí hemos sostenido como un absurdo permanente, y nuestros detractores aducen que si esto se permitiera, la pequeña industria de CHD desaparecería ante la fuerza de los capitales y recursos con que cuenta la industria pesquera de CHI.

 

Dentro de estos términos resulta muy conveniente y redituable tácticamente; esgrimir campañas mediáticas, donde se intente demostrar que la industria depreda el recurso y no hace CHD, por que su “ambición desmedida” los lleva mas allá de lógica de la sostenibilidad y eficiencia del uso de un recurso como la anchoveta. Una prensa que no comprende estos detalles del sector, se convierte en fácil cómplice de esta táctica. Empresas sin perspectiva de desarrollo y sin recursos no tienen mayor en el mercado, ya que especialmente para el sector pesquero, su valoración no se da solo por sus activos, sino por la prospectiva de su desarrollo en los años próximos. Sin futuro, las empresas no obtienen financiamiento bancario y con cuotas de captura pequeñas, sus flujos de caja, no alcanzan los medios para pagar las deudas a largo plazo.

 

Otra hipótesis son los “sicarios”, agentes mediáticos a quienes se financia e instruye para desacreditar la industria y a los gobernantes, con la finalidad de lograr colocar en el Ministerio de la Producción o Vice Ministerio de Pesca y Acuicultura a administradores “amigables”.

 

Esta hipótesis mas ligada al hampa que a otra asociación de intereses, pretende que determinadas empresas que nacieron y actúan fuera de la legalidad, se legitimen. Y cualquier administrador que les ponga el “pie en la cabeza”, imponiendo la ley, será su enemigo.

 

Una hipótesis también interesante, es la participación de grupos “proteccionistas” con gran soporte económico.

 

Se comenta entre algunos foristas de Oannes, que algunas ONGs han obtenido hace algunos años grandes fondos de fundaciones extranjeras, vendiéndoles la idea de que en el 2018, las cuotas de pesca podrían ser licitadas (algo que es falso). Lo que abriría la posibilidad de que estas organizaciones puedan comprar parte de estas cuotas para que no se pesque. La lógica de esta táctica, es que usando estos mecanismos disfrazados de “proteccionismo”, se tiene una herramienta mas para desestabilizar el futuro de empresas pesqueras que bajarían su valor y que luego podrían ser compradas a bajo costo por quienes financian esta vía.

 

De cualquier forma así no logren el objetivo propuesto, Las ONGs “proteccionistas” obtienen sus fondos y pueden mantener tácticas para desacreditar a instituciones científicas tan prestigiosas como el Instituto del Mar del Perú (IMARPE). Y este es un punto importante, por que el IMARPE, ha sido claro en marcar sus diferencias filosóficas, no es una institución proteccionista, es una institución conservacionista. Una diferencia filosófica que hemos explicado en anteriores editoriales. Al primero no le interesa que se extraigan los recursos del mar y el segundo busca una administración sostenible en el tiempo, que permita un usufructo racional y eco-amigable de los recursos.

 

Acomodar las piezas de esta “teoría de conjuntos” es por cierto complejo, ya que hay muchas interacciones. Pero como ven cualquiera pude crear “teorías de conspiración” a favor o en contra de una industria.

 

Muchos videos de pesca de juveniles exhibidos en los últimos días, ni siquiera son de esta temporada, pero a las redes sociales no les importa. El morbo que causa lo que ven difundido, basta para provocar los prejuicios que buscan sembrar quienes manipulan los hilos.

 

Lo cierto es que la temporada comenzó con una gran abundancia de juveniles, dentro de lo que el IMARPE considero como “disponible”, un concepto que la misma institución se ha encargado de definir como “lo que se ve en sus investigaciones”, que no necesariamente cubren los 3,000 Km de costa norte sur, por las 200 Millas de nuestro mar hacia el oeste, por la profundidad de este territorio .

 

Si hay tantos juveniles ¿dónde estaban los adultos? La gente común olvida que los peces tienen cola, y que el mar tiene 3 dimensiones. Históricamente, los adultos de anchoveta en situaciones como esta, pueden profundizarse o conformar cardúmenes muy lejos de la costa. Cerrar la temporada sin encontrar a los adultos, era absurdo.

 

La flota pesquera industrial, actuó con responsabilidad, exploro, encontró juveniles muy cerca de la costa y comprendiendo la situación, decidió esperar con sus barcos en puerto hasta que los cardúmenes se reagruparan y fuesen mas accesibles. Hoy la pesca exploratoria que comenzó hace unos días arroja capturas con baja incidencia de juveniles, algunos barcos han traído pesca con modas de 14-15 cm y menos del 2% de juveniles. Pero esa información no se difunde en redes sociales y si se hace, se desvirtúa argumentando que los empresarios mienten.

 

Lo que queda claro, es que esta temporada será difícil. Los juveniles son una buena noticia para la próxima temporada, en el caso de que sobrevivan y no sean alimento de otros depredadores, pero también son un problema para el pescador responsable y para el PRODUCE que siguiendo las recomendaciones del IMARPE cerrara toda área donde la abundancia de juveniles sea superior a lo recomendado para las capturas.

 

Buscar y encontrar a los adultos será difícil en estas circunstancias oceanográficas, por lo que las expectativas mas optimistas especulan que la segunda temporada del 2017, no superara las 700,000 TM. La mitad de la cifra de la cuota otorgada. Recordemos que aunque la anchoveta desova todo el año, el desove masivo esta cerca y será un limite infranqueable para la administración, que finalmente tendría que cerrar la temporada.

 

Las anchovetas no crecieron de un día para otro como aseguran algunos, finalmente la flota encontró a los adultos. Pero lo que si crece día a día, es la campaña anti-industria pesquera, que como vemos tiene mas de una explicación con diferentes hipótesis.