Fuente: Fish Information Services, FIS

Chile - Cientificos demuestran alto impacto de la jibia sobre la merluza

Pedro Barrera Garcia

lunes 27 de octubre de 2003

CHILE
Monday, October 27, 2003, 00:20 (GMT + 9)

La incidencia que tuvieron las jibias en las faenas de pesca durante el fenómeno de su gran abundancia queda demostrado en los resultados preliminares del estudio a cargo de un equipo de investigadores del Instituto de Investigación Pesquera (Inpesca) de la VII Región, dirigidos por el profesor Luis Cubillos.

La observación llevada a cabo desde julio revela que en la zona costera, la jibia depredó fundamentalmente la pesquería de la merluza, ya que del análisis del estómago de los ejemplares capturados, se determinó que la merluza de cola constituye el 30,1% de su dieta y la merluza común, el 19,7%.

Calculando muy conservadoramente una biomasa de jibia de 100.000 toneladas durante ese período de abundancia, este molusco fue capaz de remover unas 300.000 toneladas de merluza, cifra muy alta si se compara con las 140.000 toneladas de merluza común que la flota en su conjunto, industrial y artesanal, está autorizada para capturar al año.

Las especies demersales sufrieron especialmente su acción predadora, puesto que los pelágicos tienen la facultad de hacer migraciones. Estos índices generaron un distinto acceso a los recursos por parte de la flota.

De hecho, según Cubillos, el rendimiento de la pesca de la merluza común ha disminuido en relación con el año anterior, aunque éste es un indicador relativo porque dicho periodo fue considerado como "bueno".

En el área oceánica, en tanto, el jurel constituyó su principal alimento, con un 78,5%, y los llamados peces linterna, un 4%. Extrañamente, entre los peces costeros sardina y anchoveta sólo se detectó un consumo de menos del 1%.

El fenómeno de excesiva proliferación del cefalópodo se presentó con mayor intensidad a fines del año pasado y durante el primer semestre de éste, causando serios problemas a los armadores entre la V y la IX regiones, puesto que su gran número hacía que se rompieran las redes o que se debieran abrir los lances para descartar.

La legislación chilena no permite la captura de jibia como especie objetivo, sino sólo un porcentaje menor como fauna acompañante, y la industria no está preparada para procesarla.

El estudio que se realiza con la cooperación de la Universidad Católica de Talcahuano y la operación de barcos de armadores industriales, que pagaron por participar, continuará desarrollándose hasta diciembre con el muestreo y análisis de ejemplares.

Por Pedro Barrera Garcia
FIS Latino