UNA NUEVA VISION PARA UN NUEVO MODELO
Autor: Marcos Kisner
viernes 6 de junio de 2008
UNA VISION, UN MODELO
La buena nutrición de un pez es fundamental para su crecimiento y desarrollo. La mala alimentación tiene como consecuencia peces débiles y con un crecimiento lento e incluso nunca llegarán al tamaño comercial.
ENTORNO
La especie humana y su continuidad sobre este planeta, dependen de la naturaleza y no del modelo económico de desarrollo.
Los países desarrollados consumen la mayor parte de la producción mundial de alimentos, en especial los hidrobiológicos. Las personas que tienen más dinero para comprar más alimentos lo utilizan para el pago de productos cada más sofisticados en elaboración, envasado, y otras exquisiteces. Más allá de la necesidad básica de alimentación se satisfacen exigencias gastronómicas.
El hecho es que mientras esto ocurre en los países desarrollados, en el resto del mundo, en nuestro país, al mismo tiempo, una parte considerable de la población continúa con bajos niveles de consumo y de acceso a los alimentos, con la consecuente persistencia de niveles de desnutrición.
MANEJO
Es necesario asumir el manejo integral del ecosistema marino de Humboldt en todos sus componentes.
No se trata de cambiar personas, sino de cambiar mentalidades, de cambiar un modelo que a todas luces se perfila como inadecuado. No se puede revalidar o reconvertir el modelo. Es necesario evaluar los daños causados a las pesquerías y realizar las verdaderas innovaciones y cambios de fondo y no hacer adaptaciones o mejoras para revertir los daños; pues no es esto lo que requiere el ecosistema intervenido y averiado.
Esto se lograra cambiando el modelo, asumiendo un concepto que contemple un desarrollo sostenible. Se trata de replantear el sistema y de asumir posiciones críticas; ya que ser críticos es la posibilidad de construir diferentes opiniones en una democracia.
ENFOQUE ECOSISTEMICO
Hace tiempo se habla de enfoque ecosistémico, se habla de que tenemos una pesquería sostenible, pero en términos prácticos ¿cuáles son las acciones concretas y evidentes en procura de alcanzar el enfoque ecosistémico de la pesquería?. De alguna forma entendemos el concepto pero no como aplicarlo. La anchoveta sigue siendo el principal recurso del mar peruano, pero carece de un reglamento de ordenamiento pesquero. El órgano científico basa sus recomendaciones de manejo en modelos estadísticos pero no se expande en investigaciones sobre la debida alimentación de las especies predadoras de la anchoveta para poder entender mejor cuanta anchoveta debe reservarse para alimentar a las otras especies de las cuales se nutre el circuito de la extracción artesanal hasta llegar al consumo humano directo, especialmente el de nuestra propia población. O para zonificar la extracción.
Los parámetros y conceptos sobre los cuales se basan la asignación de la cuota anual de extracción no se innovan y seguiremos teniendo la duda de si las cifras son las correctas. Ya la experiencia de la merluza nos dejó el sabor a errores de concepto que causaron la sobreexplotación de la especie y la casi extinción de una industria.
La extracción de anchoveta tiene un impacto sobre las especies de la cadena trófica superior y sobre las aves que se alimentan de ella. Su captura desmedida no solamente puede poner en riesgo su propia supervivencia, sino que afecta al resto de especies que constituyen los recursos destinados al consumo humano directo. Estos últimos capturados principalmente por la flota artesanal.
SOBERANIA ALIMENTARIA
Estamos lejos de una noción de soberanía alimentaria. Dicha noción se entiende como el derecho de los pueblos a alimentarse en correspondencia con sus especificidades sociales, económicas, ambientales y culturales. Dentro de un concepto de perspectiva holística del sistema alimentario, donde el alimento sea disponible y autosuficiente. Es decir con posibilidades de su compra en mercados justos, con calidad y cantidad de alimentos sanos y libres de todo tipo de contaminaciones.
La soberanía alimentaria supone un cuidado sostenible de los recursos naturales.
La soberanía alimentaria será una realidad, el día en que el mundo se libere de los uniformes globalizadores del sistema. El día en que se adopten las medidas políticas para poder lograr una pesquería de manejo ecosistémico que permitan al país asegurar su soberanía alimentaria. Cuando los peruanos logren comer de acuerdo con su hambre, de una manera sana y en paz con la naturaleza, cuando los peruanos coman primero las proteínas que produce su propio mar antes que los mercados extranjeros, cuando los peruanos encuentren los mismos incentivos para vender alimentos al mercado nacional que al mercado externo, cuando los peruanos entendamos que los recursos pesqueros no son inagotables y que no debemos orientarlos hacia producciones masivas para enviarlos al exterior mientras haya un solo niño peruano hambriento, solo ese día el país lograra ser justo y podrá entender el término soberanía alimentaria, que en su mejor concepción podría definirse como la capacidad de alimentarnos a nosotros mismos exportando nuestros excedentes y no la inversa.
EL MODELO ACTUAL
El potencial pesquero que Perú posee por sus posibilidades de extracción del recurso anchoveta, lo coloca en una posición privilegiada dentro del contexto mundial.
El mar peruano todavía ofrece varias especies abundantes que son muy poco utilizadas por la industria o consumidas por el público. No son atractivas para su explotación porque es más cómodo vender anchoveta para la harina.
La captura de volúmenes tan grandes de este pequeño pelágico está orientada casi en su totalidad para la producción de harina, que tiene como destino principal su empleo en acuicultura.
LA DEBIDA ALIMENTACION DE LOS RECURSOS
La hipótesis de que la mala alimentación de algunos recursos es factor importante y responsable de que no alcancen las tallas debidas y que sus biomasas estén disminuyendo, debe ser asumida por el órgano científico como una posibilidad que merece investigación.
Existen antecedentes y experiencias en otras pesquerías en el mundo que confirma la validez de esta hipótesis.
Existen criaderos en Hawaii y Panamá que ilustran lo que la empresa privada está logrando con peces marítimos. Las tasas de crecimiento y conversión que documentan son sobresalientes. Los rendimientos que alcanzan empresas privadas resultan contradictorios con las opiniones vertidas por ciertos especialistas respecto a la debida alimentación como factor de crecimiento.
LAS TENDENCIAS
El sector pesquero peruano muestra, en conclusión, tres tendencias muy claras:
(a) se centra en la producción de harina de pescado para exportación, para lo cual se ha realizado en el tiempo, una importante inversión en capacidad instalada;
(b) minimiza el potencial de la pesca como proveedor de alimentos para su propia población;
(c) se orienta hacia el mercado de exportación, priorizando la necesidad alimentaria del habitante de otros países.
En este escenario ¿se puede asegurar, a ciencia cierta, que se está reservando la suficiente cantidad de biomasa de anchoveta para la conservación de la especie y para el mantenimiento de la cadena trófica superior?
LA MORTALIDAD DE LAS ESPECIES
Dos son las causales más importantes de mortalidad de las diversas especies marinas.
La primera es por constituirse en presa, es decir por servir de alimento de otras especies.
Esta causal de mortalidad es natural y se desarrolló en relativo equilibrio por miles de años. Determinó el proceso evolutivo al inducir mejores características y aptitudes para sobrevivir en las diversas biomasas, depurando a los especimenes incompetentes o débiles y potenciando los más fuertes y capaces.
Éstos desarrollaron diversas facultades particulares para alimentarse y sobrevivir. Para alcanzar sus presas, huir o refugiarse de sus predadores unos se tornaron veloces y desarrollaron fuerte musculatura y capacidad de acumular grasa corporal como reserva energética, otros permanecieron magros y sedentarios, buscando refugio en el mimetismo, los roqueríos y profundidades. Desarrollaron lomos de color oscuro para no ser distinguidos desde lo alto y panzas blancas para confundirse con la luminosidad de la superficie al ser observados desde el fondo, para citar algún ejemplo.
La otra causal de mortalidad es provocada por el hombre, la pesca, y es con certeza la más preocupante. Se potenció hace no más de 60 años gracias a la tecnificación y ha diezmado en tan breve plazo inmensas biomasas objetivo y en forma indirecta a las especies dependientes de ellas.
La maquinaria pesquera no sólo se vuelve más grande sino que se hace cada vez más numerosa. Las especies no soportan el esfuerzo pesquero moderno y declinan violentamente. Ello obliga a adoptar medidas más severas de limitación y control de la extracción y al cambio de las políticas de acceso a la pesquería en pro de la subsistencia de los recursos.
Algunos sostenemos que se sobrepesca la anchoveta y que los niveles consentidos por décadas han diezmado en forma indirecta las biomasas de peces destinados al consumo humano.
Un ajuste en sus límites máximos de captura por zonas geográficas que garanticen reservas alimenticias para las demás especies presentes en éstas es una opción a tener en cuenta.
UN TEMA DE FONDO
Un tema de fondo a tratar es la magnitud y orientación del esfuerzo pesquero total practicado por la comunidad pesquera.
La pesquería operó por años bajo el régimen de acceso libre, es decir, el que quería pescar lo hacía donde y cuando mejor convenía a sus intereses. En algún momento se prohibió la práctica pesquera de gran escala en una franja marina costera de 5 millas con la creencia que esta medida sería suficiente para preservar los recursos.
Posteriormente se introdujeron nuevos mecanismos de regulación en salvaguarda de las especies obligando a poseer permisos de pesca para realizar faenas pesqueras y así limitar el crecimiento de la flota.
Resulta imprescindible establecer mayores limitaciones al esfuerzo pesquero en el futuro inmediato junto con mecanismos que garanticen un mejor aprovechamiento de las reducidas biomasas disponibles. Un primer esfuerzo en esa dirección lo constituye el régimen de cuotas establecido para la merluza en el Perú y que sustituye al mecanismo de acceso libre a dicho recurso. Debemos esperar que esta modalidad de regulación se haga extensiva gradualmente al resto de las especies y a todos los agentes pesqueros. Tarea nada fácil pero impostergable que requiere además fomentar en la comunidad una actitud respetuosa y responsable frente a los recursos.
El esfuerzo pesquero artesanal se ha desarrollado hasta alcanzar niveles cuasi industriales haciendo uso y abuso de las normas vigentes. Desvirtuando la esencia del pescador artesanal que pesca con artes manuales para subsistir, determinadas normas populistas han calificado a un inmenso número de empresarios pesqueros como pescadores artesanales confiriéndoles patente de corso para actuar y depredar las áreas supuestamente protegida.
Resulta sensato reclamar mayor y mejor investigación científica a fin de introducir mecanismos de manejo pesquero que permitan recuperar los recursos y que beneficien realmente a la población costera.
CONCEPTOS INNOVADORES
Es importante comprender el concepto de sistema y subsistema ecológico marino.
El sistema ecológico marino peruano comprende la totalidad de los seres vivos, aires y aguas, sus contenidos disueltos o en suspensión, playas, islas, roqueríos y fondos marinos comprendidos dentro de las 200 millas.
Un subsistema ecológico es aquella porción individualizada del sistema ecológico que contiene especies residentes e interdependientes entre sí y que recibe y alberga estacionalmente aquellas que por su calidad migratoria o transzonal se manifiestan e interactúan en él.
En cada subsistema las mencionadas especies se habrán de cuantificar y evaluar para determinar los limites máximos de extracción a fin de no afectar el equilibrio del conjunto. Si bien hay especies residentes comunes a diversos subsistemas, la regulación de su esfuerzo pesquero se hará considerando la biomasa presente en cada cual.
Se justifica implementar la administración pesquera por subsistema ecológico debido a que las especies se ubican en determinados habitats marinos que le son propicios por razones de temperatura, salinidad y contenido de oxigeno, pero principalmente porque satisfacen las tres condiciones elementales de su existir: supervivencia, alimentación y reproducción.
Las especies se desarrollan y subsisten en su respectivo subsistema regulados en equilibrio en virtud de la relación presa-predador. Se comen entre ellos pero el tamaño de las biomasas predadoras guarda relación con las biomasas presa. La mortalidad por pesca sobre un solo recurso, en cambio, desequilibra el subsistema, por lo cual se considera necesaria una extracción diversificada y regulada. En el proceso habrá que aceptar que ciertas especies se reducirán indefectiblemente a cambio del esfuerzo pesquero.
El manejo ecosistémico comprende obviamente también la prevención de la contaminación.
No será fácil encontrar el límite justo a las capturas máximas. Tradicionalmente se ha regulado la pesquería evaluando las especies en forma individual con observancia de los períodos de desove y la edad o talla de la especie objetivo. El manejo ecosistémico implica necesariamente la observancia del impacto que tiene la pesca objetivo sobre las especies dependientes de ella.
El sentido común nos lleva a concluir que el esfuerzo pesquero no debe concentrarse sobre un solo recurso sino que debe practicarse racionalmente sobre las diversas especies presentes en el cada subsistema a fin de mantener un razonable equilibrio.
Se puede innovar en regulación pesquera en beneficio de todos si los diversos estamentos de la colectividad pesquera concordaran sus iniciativas. Debemos superar aquellos prejuicios que nos colocan en posiciones antagónicas cuando en el fondo estamos del mismo lado de la mesa, con una visión que difiere, en todo caso, en la naturaleza y amplitud del conocimiento y experiencia de cada uno.
ALGUNOS CONCEPTOS A INCORPORAR
Innovar elaborando un modelo de gestión pesquera que (i) valore comercialmente las biomasas de los diversos recursos pesqueros disponibles y recuperables, (ii) que valore individualmente el impacto socioeconómico de su recuperación y explotación sustentable y (iii) que establezca criterios de prioridad y preferencia de cara a las externalidades negativas que pudieran sobrevenir de la explotación de cada uno de ellos.
Estudiar fuentes alternativas de financiamiento para soportar los costos de una investigación científica adecuada.
Para efectos de control de la pesca ilegal, y a fin de hacer este control menos costoso, se intensifique el control sobre las plantas de procesamiento y sobre el mercado de pescado fresco nacional. El control debiera ejercerse de forma tal que aquella planta que procese pesca que no provenga de embarcaciones pesqueras con cuota asignada y/o debidamente identificada si se tratase de artesanales sea drásticamente sancionada. Sería conveniente incorporar medidas de sanción más drásticas como la pérdida de licencia o cierre de la planta.
Incorporar más flota no mejora el número de jornales puesto que estos están en relación directa a la cantidad de recurso que se extrae.
Si, por ejemplo, se tienen 10 pollos que sirven para alimentar a 20 personas a razón de medio pollo por persona, incrementar 10 personas más solo permitirá que cada persona en lugar de comer 500 gramos de pollo consuma tan solo 333 gramos.
Por tanto es el recurso el que define la cantidad de trabajadores y no estos últimos.
La pesca de arrastre no califica de artesanal. Consentirlo impulsa que empresarios se disfracen de artesanales para incluirse como nuevos participes.
La pesca ilegal debe ser combatida y confiscados los aparejos (la red y el winche en caso de arrastre en el caso de la flota de madera de Paita p.e.)
La asignación de las cuotas individuales transferibles es la mejor opción de manejo porque para muchos armadores no será rentable operar sus embarcaciones en una operación de pesca que puede resultar muy costosa. Por tanto es lógico que prefieran vender o transferir su cuota a aquellos armadores que por la naturaleza de sus embarcaciones y/o experiencia de sus patrones puedan asumir el riesgo de una faena de pesca en mejores condiciones.
Asignar cuotas individuales de pesca deviene en una necesidad a fin de que el sector se regule por sí mismo permitiendo salir a pescar a las embarcaciones más eficientes.
Asumir como necesaria una mayor investigación y también, si fuese posible, por científicos investigadores independientes que permitan llegar a las mejores conclusiones en los temas que tendrán impacto en las decisiones de ordenamiento que deberán adoptarse en el futuro cercano.
Una novedosa forma de democratizar el acceso a los principales recursos y generar simultáneamente fondos para la investigación es que del total de las cuotas anuales a repartir, el Estado se reserve el 10% de la misma, la cual sería subastada al mejor precio. A esta subasta podría acceder cualquier armador o persona con cuota o sin ella, lo que le daría un libre acceso limitado y generaría un fondo proveniente del mismo sector, no del Estado, que puede asignarse a actividades de investigación más profunda.
Es posible innovar en la extracción mediante la administración dinámica de caladeros o zonas de pesca.
La Administración no debe rehabilitar permisos de pesca incursos en caducidad por causales económico-financieras. Hacerlo impulsa la negociación de intangibles en desmedro de los participes activos (reduce los índices de participación individual y penaliza a aquellos que se sometieron a las restricciones del esfuerzo por la recuperación del recurso.)
Debe entenderse que la pesca industrial y la pesca artesanal son actividades humanas que provocan mortalidad y por tanto afectan la estructura poblacional de los recursos hidrobiológicos. La tendencia de la población costera por apostar por la extracción debe ser revertida. La percepción es errada y debido a desinformación.
La Administración debiera impulsar una corriente de opinión al respecto.
En los últimos 30 años el escenario pesquero ha cambiado radicalmente. Los indicadores lo evidencian:
- Menores volúmenes y menores tallas en las capturas,
- Los pescadores costeros se han convertido en pescadores de altura o proveedores de la industria harinera.
- Los botes y aparejos artesanales tradicionales se han reconvertido y mecanizado
- La capacidad de bodega y el esfuerzo pesquero se multiplica
- El número de partícipes aumenta.- Las temporadas de pesca exitosa de acortan
- Persiste la ilusión del pescador de tomar riqueza del mar y aumenta su frustración.
El recurso pesquero no aumenta en función de la demanda.
La Ley de Pesca tiene carácter promocional y ello debe cambiar; la Ley debe volverse regulatoria, limitativa y exclusivista. (Aún cuando aquello parezca impopular.
Pescar no podrá ser un derecho sino debe ser considerado un privilegio. El privilegio será de unos pocos que se obliguen a sacar la cantidad justa que garantice la sostenibilidad de las especies al menor costo en beneficio de la alimentación humana. Resulta ineludible motivar un giro en la investigación y en la política de recuperación de muchos recursos.
Un enfoque pragmático, que considere el efecto de la complejidad ecológica, y que al mismo tiempo evite la indiscriminada adición de detalles a modelos matemáticos de competencia (entre especies), es la mejor manera de proporcionar asesoramiento científico sobre cuestiones que requieren una acción urgente.
Cuando todos los indicadores señalan que los recursos pesqueros en un área están en decadencia, cuando se han aplicado las propuestas formales sin éxito, es tiempo de innovar, de ser pragmático y reconocer que no hay verdad absoluta.
Es tiempo de intentar medidas preventivas relacionadas a las pesquerías de presas en el sistema Paita-Bayobar, sujetas a ajustes a la luz de la investigación futura.
Los medios del Estado deben orientarse a la educación, a la capacitación y al asesoramiento previos antes de brindar apoyo financiero a la población pesquera. No debe estimularse la formación de más tripulantes ni más pescadores, ni más embarcaciones, sino perfeccionar a los actuales, convertirlos en añadidores de valor agregado, llevarlos a la creación de cadenas productivas, hacerlos microempresarios que construyan una cadena que lleve sus productos por todos los rincones del país.
La educación a distancia debe ser incorporada aprovechando la masiva utilización de la Internet, así como la creación de un sistema de asesoramiento y consulta on line con las entidades educativas y financieras que asuman la responsabilidad de brindar apoyo a la población dedicada a la pesquería, especialmente la artesanal.