Conservacionismo y pesquería responsable, dos caras de una misma moneda

Autor: Francisco J. Miranda Avalos

viernes 29 de junio de 2012

Conservacionismo y pesquería responsable, dos caras de una misma moneda

Vitucho Querevalu de Cancas me decía días atrás, que nadie esta mas interesado en lograr una pesca sustentable en el tiempo, de todos los recursos pesqueros de su zona de pesca, que el, y todos sus demás colegas pescadores. Ha vivido del mar durante sus mas de 65 años y pertenece también a una tercera generación de pescadores del Bajo Piura, que radica desde hace años en Cancas, el ya no sale a pescar, pero sus hijos salen a faenar en su viejo bote. El esta preocupado por su futuro…”La gente no respeta las normas y hay normas absurdas que no deberían existir. Pero se puede crear conciencia entre la gente común para que comprenda los problemas de los pescadores del Perú, si la gente no comprende, se seguirán cometiendo injusticias y pronto nos quedaremos sin nada que pescar”.

La fauna marina de la zona ha cambiado en los últimos 10 años, en lugares donde el mero, los paramos, san pedros, cabrillones y langostas reinaban, hoy reina un mundo de castañuelas territoriales que espantan a los meritos chicos que buscan su “cao” o cueva, pocochos, peces cofre, tamborines y otros globos por donde uno mire bajo el mar. Los fondos antes rocosos oscuros llenos de mariscos tales como las ostras e incipientes formaciones coralinas, están llenos de un alga verde que no identifico aun. El cambio ecológico ha sido severo al desaparecer la especies que originalmente ocupaban ese espacio, que competían por alimento, o eran predadoras de las que actualmente ocupan ese nicho ecológico que hoy prosperan sin control.

La incidencia de la participación humana en recursos marinos, trae inevitables cambios ecológicos que alteran por completo los ecosistemas y la vida de las personas que dependen económicamente de los recursos del mar, y este es un caso donde la ciencia y los pescadores deberían colaborar mano a mano. Día a día. Pero ¿Que trabajo conjunto han hecho los pescadores y científicos peruanos en la zona para poner un ejemplo?...creo que la respuesta es ninguno. Nadie sabe por que, nadie quiere entender el por que. Y el estado parece totalmente ajeno a todo esto.

De la misma forma; un empresario merlucero me contaba con pena que liaba sus bártulos para devolver a su esposa e hijos a su madre patria, luego de enamorarse del país y haber engendrado un hijo peruano…”Tanto nadar, para morir en la playa” me repetía con desazón. Mientras me contaba parte de su vida y sus luchas por recuperar una pesquería, considerada depredada por la ciencia oficial. Sin tomar en consideración hipótesis que repetían sin cesar que la merluza no estaba depredada y que buena parte de la biomasa había migrado hacia el norte donde el esfuerzo pesquero para esta pesquería era casi inexistente.

Sea como sea, al bajar mucho la disponibilidad de la merluza, desde El Niño del 97-98 hubo de parte del estado peruano una política muy estricta de control de esta pesquería, se decreto una veda de casi 2 años borrando del mapa empresarial al 50% de las compañías procesadoras y armadoras. Luego se implemento el primer sistema de cuotas de pesca, que incluía la obligación de embarcar a un TCI (Técnico Científico de Investigación) para la recolección permanente de data, que debía ser usada permanentemente por el IMARPE.

Los armadores en su afán de hacer pesca con responsabilidad se pusieron de acuerdo para la eliminación de los trenes de arrastre de sus redes, se prohibió pescar en zonas rocosas o fondos vulnerables, todo esto dentro del marco del creado Régimen Provisional de Recuperación de la Merluza. La pesquería de la merluza peruana es la única pesquería de arrastre en el globo que habría podido recuperar parte de sus stocks históricos y aspirar a ser sustentable e incluso certificada.

El pescador de merluza comprende ahora que tuvo una biomasa importante del recurso a su disposición, que pudo perderla para siempre años atrás. Pero gracias a los enfoques precautorios de las anteriores autoridades, apoyadas por los mismos pescadores e industriales pesqueros, a lo largo de estos últimos años se han logrado resultados muy interesantes que deben evaluarse con inteligencia y rapidez.

El universo de la pesquería es muy dinámico, hoy el recurso esta presente con tallas interesantes y una biomasa interesante. Y todo parece indicar que la decisión ultra -precautoria de la ultima administración pesquera, considerada como conservacionista, fue exagerada y analizada sin una correcta objetividad científica.

Pero aquí surge entonces una pregunta licita, ¿los criterios conservacionistas están realmente en contra de los pescadores?

Para responderme esa pregunta revise diversos correos que se cruzaron en la Lista Oannes, durante la ultima crisis de la Merluza, incluidos algunos correos enviados por el seudónimo Papa Merluza o Miguel Seminario dirigidos como dardos sobre la actitud y posiciones de la ultima administración pesquera peruana.

Un punto realmente interesante durante toda esta crisis de la merluza es el relacionado con los informes del Buque de Exploración científica Español Miguel Olivier, ya que la ultima administración desacredito inexplicablemente a uno de los mas importantes y modernos buques de la Secretaría General de Pesca Marítima del Ministerio de Agricultura y Pesca de España (MAPA). Especialmente diseñado para las prospecciones de abundancia, distribución y estudios de especies marinas, así como para el desarrollo de estudios de geología marina, física, química y medio ambiente. El Miguel Olivier es uno de los buques más modernos y completos del mundo en el ámbito de la investigación.

Los informes de las prospecciones del Miguel Olivier en el Perú y en el Ecuador apoyaban la hipótesis de que parte importante del stock de merluza emigro a costas ecuatorianas, pero como dije ya fueron totalmente desestimados por la anterior administración.

Como estos dos casos, existen muchos en el Perú, quizá demasiados, la autoridad encargada de la administración pesquera no conversa con sus científicos y lo que es peor, sus científicos están alejados de la realidad por que no conversan con pescadores o empresarios pesqueros, ni hacen estudios frecuentes en el mar, por la enorme escasez de recursos económicos que acusan. Esto sin duda resulta en una constante de conflicto entre la visión del científico y la visión del pescador. Si a eso le sumamos una autoridad de turno con una posición conservacionista radical. Tenemos la receta perfecta para la convulsión social.

Cada practica pesquera tiene su particularidad y un nicho ecológico donde influye, desde la simple pesquería de artesanal de líneas y anzuelos que explota los fondos bentónicos costeros, hasta las complejas pesquerías de profundidad, pasando en el camino por todas las demás, pesca de merluza, mahi mahi, tiburón, anchoveta, caballa, jurel, etc. Cada pesquería tiene un arte, cada arte de pesca sus detalles y su influencia en el medio ambiente, con consecuencias que aunque se pueden medir, no se miden correctamente, ni objetivamente; producto de este divorcio entre el científico (que es básicamente conservacionista) y el pescador.

En el caso de la pesquería de la merluza, por ejemplo, resulta inaudito que teniendo un técnico científico a bordo de todas y cada una de las embarcaciones, esta información no pueda ser correctamente analizada por los científicos. El propósito de este recolector de data, es precisamente mantener el vinculo informativo actual de la situación de una pesquería con la ciencia encargada de hacer las recomendaciones a la autoridad administradora de los recursos.

La relación entre un científico y el pescador, debe ser la mas estrecha posible, mas si se siente participe de la filosofía conservacionista.

De esto hay muchos ejemplos en el mundo, la pesquería del pez espada del Atlantico, por ejemplo, estuvo a punto de colapsar, lo mismo que la del halibut en Alaska y mas allá de los detalles de las políticas de administración adoptadas para su recuperación, acertadas por cierto, fue en realidad un aspecto técnico promovido por conservacionistas las que la salvo de la debacle y hoy las hace sustentables en el tiempo. El diseño del nuevo anzuelo circular, reemplazando al anterior en forma de “J”.

El nuevo anzuelo circular desarrollado en colaboración entre la NOAA y el WWF, fue diseñado inicialmente para reducir las capturas incidentales de tortugas marinas, y evita que estos animales puedan tragarlos o quedarse enganchados en ellos, con la consiguiente asfixia o sangrado interno. Además resulta mucho más fácil soltarlos cuando se enganchan.
El costo del cambio en tecnología no ha sido enorme, ya que los pescadores cambian o reemplazan sus anzuelos con mucha frecuencia.

Pero lo mas importante, y que me interesa destacar, es que el nuevo anzuelo circular también ha traído como consecuencia la sustentabilidad de la pesquería del pez espada del Atlántico y de muchos peces pescados con anzuelos, por que se logra una importante mejora en los precios de la pesca, ya que el pez al ser atrapado en la esquina de la boca y no en sus entrañas llega más fresco al puerto, logrando un mejor precio para los pescadores, además permite liberar fácilmente a los especímenes que se encuentran por debajo del tamaño mínimo, asegurando su supervivencia.
Esta es una prueba real de que cuando un grupo de científicos conservacionistas colaboran con los pescadores y un organismo de estado; se encuentran soluciones practicas a los problemas, pero claro, debe haber voluntad de las partes, sin ello nada es posible.

La tecnología en artes de pesca es uno de los campos que debemos explorar en búsqueda de la solución para lograr pesquerías sustentables en el tiempo, sin extinguir los recursos, ni dañar los ecosistemas. En redes de arrastre tanto como en las de cerco, desde hace años que los científicos prueban nuevas tecnologías para evitar la pesca incidental y permitir el escape de juveniles, tratando de convertir el arte en cada vez mas selectivo. Son esfuerzos que no se deben abandonar y que claramente los peruanos no consideramos aun como solución a nuestros problemas, pero que sin embargo lo son.

La ideología conservacionista, no es pues una utopía, pero de ninguna manera esta opuesta a la pesca responsable, por el contrario, es parte importante de proceso. Todo depende de la voluntad para explorar las sinergias.
¡Feliz día del pescador!