Señor ministro de la Producción ... ¡Ya pues!
Autor: Francisco J. Miranda Avalos, Presidente de la J. Directiva de la ONG Oannes
lunes 6 de diciembre de 2021
El posible nombramiento de un nuevo Viceministro de Pesca y Acuicultura, ha puesto en guardia al sector y el razonamiento promedio que venimos escuchando y compartimos, es más o menos el siguiente: “3 ministros en un poco más de 100 días y ahora cuando tenemos una vice que ya aprendió su trabajo, se le pretende reemplazar por alguien, por decir lo menos, con serios cuestionamientos. Pero que además no tiene la más minina experiencia en pesca o acuicultura, habiendo cientos de ingenieros pesqueros y acuícolas en el Perú, formados además por universidades nacionales, porque esa profesión no existe en las universidades privadas. ¿Cómo llamamos a esto? ¿Coherencia estatal?” …no hay forma.
Bueno, en realidad lo que no existe de parte del estado y menos del gobierno es una política coherente para el sector pesquero y acuícola nacional.
Pero seamos menos apasionados y más analíticos. La presente temporada de pesca es quizá la más exitosa en los últimos años. Aunque se han cerrado algunas áreas con gran presencia de juveniles, las tallas de captura son bastante buenas y el porcentaje de juveniles muy pequeño…la flota se está esforzando por no capturar juveniles y esto se ve en los números. ¿Es posible? ¡Claro que es posible! Además, los juveniles presentes en diferentes modas, auguran una excelente próxima primera temporada 2022.
Nos comentaron hace un tiempo, que por lo menos una empresa pesquera grande, están en tratativas y quizá hasta en proyectos comunes con sus proveedores, para desarrollar un sistema de ecosonda que tenga cualidades discriminativas y permita a los capitanes interpretar el cardumen que ven bajo sus barcos antes de lanzar la red, su porcentaje de juveniles y de que tallas. Responder a esta necesidad es sin duda un esfuerzo tecnológico importante, pero sé lograra, si las empresas y sus proveedores colaboran seriamente.
Por ahora el clima frio de “La Niña” y la manera precautoria con que el IMARPE está haciendo sus recomendaciones para que el PRODUCE administre una de las pesquerías más importantes del mundo, está funcionando y bastante bien.
Por si fuera poco, la Fiscalía del Callao, archivo la absurda investigación a funcionarios del IMARPE acusados de falsear datos de anchoveta para beneficiar a pesqueras, que promovió la ex Ministra Roció Barrios. Con este acto, después de un año y medio; la fiscalía reconoce que los audios y documentos entregados por un trabajador del IMARPE “no son pruebas” que demuestren que funcionarios de esta institución manipularon las cifras para el supuesto favorecimiento de grandes empresas pesqueras.
Ya en otra editorial, hemos hablado de la lógica de la sostenibilidad y creo que dejamos claro que ningún empresario quiere matar a la "gallina de los huevos de oro". Y que la sostenibilidad es un tema de importancia para todos los mas de 700 mil personas que viven de esta industria de manera directa o indirecta. Una pesqueria de anchoveta insostenible y depredadora solo está en la mente de ignorantes, tontos o malintencionados.
Una pesquería peruana de anchoveta sostenible es fundamental para un proyecto coherente de desarrollo pesquero y acuícola nacional. Es uno de los recursos más importantes y parte de una de las cadenas alimenticias más importantes del mar peruano, que termina alimentando a millones de seres humanos de manera directa o indirecta. Podría usted estar comiendo un salmón o trucha de cultivo en cuya fórmula del pienso, se ha incorporado harina y aceite de pescado. O tal vez un pollo, un cerdo o un bovino. Las leches y cualquier producto con Omega 3 tienen aceite de pescado. Y por supuesto ahora también sabe qué los filetitos de anchoas y la anchoveta en conserva, se hace también con anchoveta peruana. Ya no son los años 60s donde todo era hacer harina y aceite con la anchoveta que se pescaba sin medida.
Hoy vemos una gran industria, liderada por un sector importante. Pero muchos aun ven la pesquería con ojos del pasado, o de maneras diferentes: CHD y CHI, Congelados, Harinas, etc. Pero los números continúan diciéndote que casi las dos terceras partes de las exportaciones pesqueras peruanas son de harina y aceite de pescado. Y la otra tercera parte son congelados, conservas, secos, etc. Lo coherente y natural, una vez debidamente ordenado y vigilado el sector, es hacerle caso a la naturalidad de la pesquería y a la misma Ley General de Pesca, sobre todo en la parte de “uso preferente de las materias primas para consumo humano directo” … es un paso difícil, pero no imposible. Para esto no es necesario cambiar la ley de pesca, solo actualizarla en algunos aspectos y por supuesto respetarla.
Al día de hoy en plena segunda temporada de pesca 2021 de anchoveta stock centro norte. Las cifras de la captura son muy interesantes. Al tercer día de diciembre, la flota ha capturado el 50.59% de la cuota autorizada por el PRODUCE, con un promedio de captura diaria superior a las 50 mil toneladas / día. Si no cambian las condiciones oceanográficas, se podrá terminar la temporada para que los tripulantes lleguen a su casa en navidad, cerrando un gran año de pesca.
A veces pienso que los políticos creen que este sector se mueve casi en “automático” y por ello pueden poner a cualquiera en un cargo importante de la administración pesquera y acuícola nacional. Y eso es un grave error.
La forma en que la ley define la pesca artesanal ha permitido de incorporación de un gran número de embarcaciones al régimen artesanal, no siendo realmente artesanales, pero que se esconden dentro del régimen, para hacerse de los beneficios que el estado le otorga al régimen artesanal. El control y la vigilancia necesaria para evolucionar, brillan por su ausencia.
Hoy el propio PRODUCE sostiene que existen 820 embarcaciones que participan en actividades pesqueras durante todo el año, no pueden ser fiscalizadas porque muchas no cuentan con el Sistema de Seguimiento Satelital - SISESAT. Sin embargo, solo 390 embarcaciones son legales. ¿Es decir 430 embarcaciones ilegales? ¿El número de ilegales supera al de los legales? ¿Cuantas embarcaciones legales tienen SISESAT?
Es fácil entender a la Asociación de Pescadores Artesanales de Chimbote, cuando dice que esta producción debería ser atendida por 37 fábricas, pero solo existen 17. Los ilegales superaron a los legales y llevaron a la quiebra el negocio de los legales…y por eso hay tanta anchoveta en la pampa secándose al sol, para luego hacerla harina de pescado. Ahora los ilegales, que nunca pagaron impuestos, quieren comprarle a los legales sus licencias de pesca por una miseria y por supuesto, el barco no les interesa...ellos tienen uno ilegal que quieren legalizar. ¿El estado peruano favorece la legalidad o la ilegalidad?
¿En qué momento aparecieron 430 embarcaciones más, para abastecer 17 plantas? Para nosotros no es sorpresa, eso es algo que venimos advirtiendo públicamente desde hace algunos años y basta con revisar nuestros artículos.
El desarrollo de una industria conservera es absolutamente necesario, y si hay sobrecostos, debemos encontrar la forma de reducirlos para ser competitivos mundialmente, es una tarea pendiente. Tenemos anchoveta y además de tener muchos otros pescados y mariscos para alimentar a nuestra población, el Perú puede producir pescados y mariscos para alimentar al mundo entero.
Pero primero habría que cambiar algunas normas, como por ejemplo aquella que permite un descarte del 40% de la pesca de anchoveta, no más llegando al puerto. Este ha sido el incentivo perverso, con el que todo este caos comenzó.
Todas las embarcaciones pesqueras en el Perú, sin excepciones, deberían responsabilizarse por entregar un producto de primera calidad, pero con una eficiencia superior al 85%. Es decir, el descarte no debería ser mayor al 15%, como alguna vez recomendó el ITP y todas las embarcaciones deberían tener bodegas insuladas, con un sistema de conservación o refrigeración que asegure que la materia prima llegara en buen estado y no sea necesario “descartarla” ¿Que no se puede? ¡Por favor! otros países solo tienen 2% de descarte de capturas, simplemente por qué se esmeran en cuidar la materia prima.
El país puede desarrollar una súper industria conservera de pescados y mariscos, de la pesca o de la acuicultura. La conservería de atún en el Perú, por ejemplo, está creciendo a picotazos y trompicadas, pero parece que su principal enemigo es el estado mismo.
La falta de políticas pro desarrollo pesquero y acuícola nacional, hace en realidad que toda la industria nacional pesquera o acuícola se desarrolle con su fuerte inercia, pero con ausencia total del apoyo o administración del estado, creando un sector donde se mezcla la informalidad, con la ilegalidad y la legalidad, y donde la legalidad sale perdiendo. Cuando debe ser protegida, por qué es la que paga los impuestos y puede lograr la sostenibilidad de los recursos.
Desde hace muchos años, nuestra organización viene recordando, que lo que necesita real y gran apoyo es el sector de pesca artesanal de orilla, embarcada y no embarcada. Para nosotros esta es la verdadera pesca artesanal, que además puede ser selectiva y cuyas asociaciones pueden hacer acuicultura. Sus caladeros de orilla requieren de mucha investigación, así como de propuestas de administración o autogestión.
Este año que viene, el Perú presidirá el Comité Directivo de la FAO para la celebración del Año Internacional de la Pesca y Acuicultura Artesanal (AIPAA). PRODUCE ya emitió una RM (RM Nº 00193-2021-PRODUCE) creando el "Grupo de Trabajo para apoyar a la Presidencia del Comité Directivo Internacional del Año Internacional de la Pesca y la Acuicultura Artesanales (IYAFA 2022), asumida por el Estado Peruano". Y será presidido por el Viceministro/a de Pesca y Acuicultura.
Sr. ministro de la Producción o deja a la actual viceministra de pesca y acuicultura en su cargo, que defiende la legalidad y ha aprendido la importancia de su trabajo; aunque no les guste a algunos armadores de CHD su presencia y 430 embarcaciones ilegales hagan lobbies en su contra. O pone alguien que supere su perfil. Pero no le dé el cargo a quien no tiene ni la más mínima idea de lo que es el sector y lleva en su mochila serios cuestionamientos. ¡Ya pues señor ministro… un mínimo de coherencia!
