Fuente: La Capital, Mar del Plata

Argentina - Piden apoyo para que se les garantice el derecho a trabajar

Los cooperativistas temen por posibles pérdidas millonarias

lunes 27 de octubre de 2003

La continuidad del paro anunciado por el SOIP genera preocupación en las cooperativas. Hoy habrá una reunión con Katz para pedirle una gestión de apoyo. Piden vigilancia policial en las plantas para asegurar el funcionamiento pleno.

Representantes y trabajadores de las cooperativas marplatenses en conflicto realizaron una serie de manifestaciones y protestas para pedir el respaldo del poder político y de la justicia a fin de asegurar la continuidad de trabajo sin interrupciones en el fileteado de los pescados. Asimismo, los empresarios se mostraron preocupados por las eventuales y casi seguras pérdidas millonarias que padecerán debido a la mercadería que permanece en los barcos, que no arribó a puerto ya que las plantas procesadoras, en su mayoría, no están operando, no, al menos, como deben.
Se prevé que, de continuar la situación tal como está planteada, el pescado se echará a perder en dos o tres días más y, en ese caso, las pérdidas de dinero serán considerables y la economía del puerto se resentirá notablemente, afectando directa e indirectamente a muchos más que los cinco mil trabajadores fileteros involucrados en el conflicto.
"Después de la reunión del Club Peñarol, vinieron el segundo jefe de la Departamental, De Avila, y Navas, de la seccional tercera. Se comprometieron a gestar un operativo para dar seguridad en las plantas y que no sean atacadas por los grupos que golpean a la gente. La reunión terminó a las 12.
Ahí nos comprometimos a entregar la lista de cooperativas y el horario en el que iban a empezar a trabajar", señaló el doctor César Sivo, asesor legal de las firmas.
Explicó que, sin embargo, "a las madrugada, dos cooperativas sufrieron agresiones por parte de grupos armados. Intimidaron a los trabajadores y pararon a la gente de blanco que se dirigía a los lugares de trabajo.
Incluso, golpearon un vehículo. El personal se fue. Los pocos que quedaron no trabajaron por temor a sufrir agresiones. Todo comenzó a las 2 ó 3 de la mañana".

Reacción

Debido a las agresiones sufridas, que se sumaron a las anteriores ocurridas días pasados, representantes de las cooperativas y trabajadores se reunieron con la fiscal de turno, María de los Angeles Lorenzo, en la sede de Tribunales a las 9 de la mañana. "Nos dirigimos para pedir cooperación. Es que la policía dice que le falta la orden de la Fiscalía para actuar. Se cortó la calle y estuvieron presentes alrededor de 400 personas", señaló Sivo.
"Las cooperativas manifestaron sus inquietudes y pidieron que los fiscales hablen con gente. Cortaron la calle porque no les hicieron caso. Entonces, se llenó de policías. Pensaron que, claro, 'no van a la planta, pero sí acá'. Eso provocó más enojo todavía", expresó el asesor legal.
La fiscal, por su parte, consideró que la situación necesita soluciones políticas, al margen de cuestiones penales que se están estudiando por las agresiones y las irrupciones violentas en las plantas procesadoras.
A partir de ello, los manifestantes se dirigieron a la Municipalidad para pedirle al intendente Daniel Katz que los ayude. Acordaron las partes una reunión a primera hora de la mañana, a las 7. Una delegación de aproximadamente 15 personas se entrevistará con el jefe comunal, quien se comprometerá a realizar una gestión personal ante la Provincia y la Nación para garantizar el derecho a trabajar.

Algunos números

Algunos datos sirven, en principio, para conjeturar sobre las posibles pérdidas económicas en caso de que el pescado no pueda ser bajado de los barcos a los camiones, para que éstos los transporten a las plantas, donde deben ser fileteados, salados y envasados.
"Hay 5.000 fileteros que trabajan a destajo, por lo que producen cada día.
Cada cooperativa faena entre 1.000 y 2.000 cajones de pescado; en un promedio de 1.000 cajones, son alrededor de 60 mil pesos, pero se podría llevar esa cifra a más o menos 100 mil pesos cada tres días aproximadamente; y son cien cooperativas. O sea que la cifra es muy importante e implicaría una gran pérdida para la economía del puerto", estimó el doctor César Sivo.
"Están todos dentro del mismo círculo, porque después hay que tomar en cuenta a la cantidad de gente afectada, directa e indirectamente. Los barcos no pueden bajar porque no les compran el pescado; los saladores no pueden salar por no tener materia prima, lo mismo los envasadores. Son, más o menos, 10, 12, 15 mil personas afectadas que no pueden trabajar ni cobrar, dejando una economía completamente resentida", alarmó Sivo.
Asimismo, Rubén Burcos, de Coomarpes, informó que esta firma tiene tres o cuatro barcos esperando calar en el puerto local, aunque también mencionó que hay varios más de otras empresas en la misma situación. "Cada barco cuenta con tres o cuatro mil cajones. En la medida que pasen los días, el pescado se echará a perder. "Hoy es un día clave para salvar la mercadería.
Nosotros, en las cooperativas, estamos analizando los pasos a seguir.
Queremos conseguir apoyo político".
En tanto, la doctora María de los Angeles Lorenzo, fiscal de turno, aclaró que "los representantes de las cooperativas, Julio Díaz y César Sivo, con quienes me reuní, informaron de los hechos acontecidos. De todos modos, más allá que recepcioné sus denuncias, es la policía la que actúa con un plan preventivo. La Fiscalía investiga la comisión de delitos".
Por su parte, como ya se mencionó, el intendente Katz se comprometió a "realizar la gestión para garantizar la continuidad de trabajo porque en esta cuestión les asiste el derecho a los cooperativistas y los trabajadores. Las pérdidas económicas pueden ser cuantiosas y, entre otras cosas, se pedirá la custodia policial de las plantas".