Fuente: Univision, Miami

Canada - Programa Asia-Pacifico vigila la pesca martitima en alta mar

sábado 7 de mayo de 2005

VANCOUVER, Canadá, Mayo 7 (AFP) -
Mientras 18 países discutían acaloradamente en una conferencia sobre el exceso de pesca en el Atlántico norte, seis Estados del Asia-Pacífico lanzaron un programa anual de vigilancia en alta mar.

El avión canadiense de largo alcance Aurora, basado en Alaska, empezó este mes a patrullar el Pacífico norte como parte de un programa con China, Japón, Rusia, Corea del Sur y Estados Unidos para frenar la pesca ilegal con red.

La aeronave transporta a agentes pesqueros canadienses y estadounidenses que instan a las embarcaciones de pesca sospechosas a acercarse al país más cercano para ser inspeccionadas, dijo un funcionario gubernamental en Vancouver.

El programa de vigilancia del alta mar del Pacífico es "un modelo que otras organizaciones deberían seguir como fuente de seguridad", afirmó Robert Martinolich, jefe de seguridad para el departamento de Pescadores canadienses en la costa oeste.

En el océano Atlántico, las reservas como la del bacalao del norte y el salmón del Atlántico, han sido casi exterminadas por el exceso de pesca por parte de diversos países, entre la costa este canadiense y Europa.

En el Pacífico norte, "no hemos tenido ese colapso espectacular", dijo el biólogo Otto Langer, de la Fundación David Suzuki, una organización ambiental basada en Vancouver.

Luego de una resolución en 1991 de la ONU que prohibió la pesca con red, según Langer, especies del océano Pacífico como el halibut, la merluza y algunas clases de salmón permanecen relativamente sanas.

La fuerza del Pacífico norte tiene la gran tarea de controlar millones de millas cuadradas entre Estados Unidos y Asia. El programa anual comenzó en
1993 y se basa en los barcos guardacostas estadounidenses y japoneses, así como en el servicio ruso de fronteras para aprehender embarcaciones pesqueras de red, explicó Martinolich.

Según él, el programa ha logrado reducir el número de embarcaciones ilegales cada año, incluyendo sólo una en 2004, lo que supone una reducción del 90% de la pesca ilegal.

El último año con mayor actividad en este frente fue 1999, cuando 11 embarcaciones fueron detectadas y tres fueron detenidas por China y Estados Unidos.

"Desde entonces, la obediencia ha sido alta", expresó Martinolich, agregando que la mayoría de los navíos ilegales tenían tripulación china o taiwanesa, y bandera según la conveniencia.

Pese a estar oficialmente prohibidas, las redes de pesca aún son ampliamente usadas en el mundo.

"Son tan amplias que cazan cualquier cosa, incluyendo ballenas, marsopas, salmones, atunes y aves marinas", asegura Martinolich.

Una de las razones por las cuales las naciones costeras cooperan, según los expertos, es porque peces como el salmón regresan a ciertos países para desovar, y los Estados aceptan su responsabilidad en la conservación de sus especies.

En alta mar en el océano Atlántico, a unas 200 millas de cualquier zona económica, hay mucha menos cooperación internacional.

En una conferencia internacional en St. John's, Newfoundlans, sobre la costa este canadiense, cientos de delegados de 18 países se reunieron a inicios de mes para discutir sobre la gestión global de la pesca.

Diversos países europeos se oponen a apostarle a que Canadá sea el guardacostas líder sobre las reservas en el Atlántico, mientras que muchos otros se disputan su participación.