Fuente: El Diario, Santiago de Chile

Chile - Nueve dias separan a la industria pesquera de la temida 'carrera olímpica'

miércoles 27 de noviembre de 2002

Existen visiones encontradas sobre el eventual éxito de la ley corta de pesca

Exequiel Pino C.

El gobierno sólo tiene nueve días legislativos para revertir la derrota que sufrió con la ley corta de pesca en la Cámara de Diputados y evitar así la temida carrera olímpica en el sector pesquero. Así lo entienden los empresarios y trabajadores que miran "con preocupación" el curso de los acontecimientos al interior del Congreso porque "temen un nuevo revés", que termine con la ilusión de contar con ese marco antes del 31 de diciembre, fecha en que expira la actual normativa.

Ello porque sólo quedan tres semanas legislativas y como el Congreso sólo funciona de martes a jueves (en el caso de la Cámara Baja porque el Senado sesiona hasta el miércoles) en la práctica acota a nueve sesiones el lapso para despachar la prórroga legal "si es aprobada" y a menos de quince días para su promulgación y publicación en el Diario Oficial.

Es decir una verdadera lucha contra el tiempo que, al igual que el presidente Ricardo Lagos, asumió ayer enérgicamente el ministro de Economía, Jorge Rodríguez, al cuestionar en muy duros términos a todos los parlamentarios que rechazaron la prórroga ( por diez años) propuesta y a quienes instó a "cambiar de actitud" por el bien del país.

Sin embargo, el ministro de Economía no pierde las esperanzas y confía en que logrará que el Congreso despache la ley la próxima semana, siempre que el Senado apruebe el miércoles las indicaciones que repondrá el martes y que luego sean aprobadas en segunda instancia por la Cámara de Diputados, lo que debiera ocurrir el jueves de esa semana.

Ahora, si los diputados insisten en rechazar la iniciativa, esta deberá ser vista por una comisión mixta y luego nuevamente por cada una de las cámaras lo que pone al proyecto en el límite de los plazos y deja ad portas la carrera olímpica.

Escenario

En este complejo escenario cada voto resultará ser muy valioso, y hasta ayer el ministro de Economía dijo contar con 31, es decir, más de los 25 sufragios que requiere para pasar la prueba del Senado. Ello, siempre y cuando la comisión de Constitución Legislación y Justicia de la Cámara Alta declare que los senadores DC, Andrés y Adolfo Zaldívar no están inhabilitados para votar por el supuesto "conflicto de intereses" que denunciaron el senador, Nelson Avila (PPD), y el economista, Marcel Claude.

En lo inmediato, el gobierno entregó ayer un categórico respaldo a los cuestionados senadores, a través del ministro del Interior, José Miguel Insulza y del propio titular de Economía Jorge Rodríguez, quien calificó como prácticas "gansteriles" los intentos de enlodar la imagen de los senadores para amedrentarlos e inhibirlos en la votación.

"Me parece un método gansteril, inmoral y quiero respaldar públicamente a Andrés Zaldívar", enfatizó Rodríguez y luego agregó "quien tenga una acusación concreta que recurra a los tribunales pero no acepto esto, porque es un asesinato de imagen que no estoy dispuesto a tolerar en la vida política chilena".

Incluso cuestionó las razones de fondo que mueven al economista Marcel Claude a quien acusó de dañar las posibilidades de exportación que tiene Chile al exterior en los productos simbólicos como son el salmón y la madera.

"¿De dónde saca plata el señor Marcel Claude para financiarse, quien le está pagando?, me gustaría saber ¿quiénes son los financistas de la Fundación Terram? Para que el país pueda saber si a lo mejor detrás de eso no hay exportadores de salmones y de madera de otros países", reflexionó.

Además, en este cuadro se debe considerar las modificacones en la composición de la Cámara Baja si se ratifica el desafuero que afectó a 5 diputados de la Concertación.

Electorales

Pero los descargos del ministro de Economía no se limitaron a este tema porque también reaccionó con dureza frente a todos los legisladores que rechazaron la iniciativa legal en la Cámara Baja a quienes acusó de sacar "pequeñas cuentas electorales".

"Detrás de los cálculos de los parlamentarios de oposición y de los legisladores desleales de gobierno que han votado en contra del proyecto hay cálculos electorales", enfatizó y precisó que ellos están relacionados con los intentos de obtener cuotas especiales en algunas especies como en el jurel, la merluza corriente y la merluza austral.

Al respecto el titular de Economía recalcó que el gobierno no está dispuesto a negociar cuotas a cambio de votos y luego, más directo, recalcó "no le vamos a dar al señor Pablo Longueira la posibilidad de sentirse triunfador porque nos pasa unos votitos más o menos a cambio de pescados".

Luego insistió en que está dispuesto a llegar a un acuerdo con la oposición, pero aclaró que "si la UDI está dispuesta a negociar no será sólo con el gobierno sino que con todos los partidos incluido RN y la Concertación, pero que no esperen que por sus votos terminemos dándoles en el gusto a sus caprichos".

Incluso aseguró que el rechazo que dio la UDI a la iniciativa del gobierno se debió a que "él (Longueira) está picado, porque no le aguantamos simplemente y no le vamos a aceptar esos términos de negociación, ahora si el tiene otros planteamientos serios vamos a estar dispuestos a considerarlos".

Cuenta regresiva

Mientras tanto y a pesar de la compleja situación que enfrenta la iniciativa legal, el presidente de la Sofofa, Juan Claro, desestimó la posibilidad que se reanude la carrera olímpica porque confía en que "se restablezca la cordura".

"Ello -dijo- porque Chile necesita un marco regulatorio que le permita desarrollar en forma sustentable la actividad pesquera y, por eso, esperamos que se restablezca el espíritu original de la ley que es la de generar justamente las condiciones para la inversión y para tener actividades con mayor valor agregado, que permita generación empleos y además conservar los recursos pesqueros".

En todo caso, Juan Claro reconoció que se vieron sorprendidos por la votación inicial y que la agenda sufrió un revés, "pero no queremos pensar que este proyecto no se va a desnaturalizar y esperamos que reine la cordura".

Sin embargo, un visión menos optimista a la manifestada por el líder de la Sofofa y el ministro Rodríguez entregaron ayer los empresarios y trabajadores que laboran directamente en la industrial pesquera.

Mientras, el presidente de Sonapesca, Roberto Izquierdo aseguró que el futuro del proyecto es incierto porque "la votación será difícil", la presidenta de la Federación de Sindicatos de la Industria Pesquera (Fesip), Teresa Lizana, recalcó están muy preocupados porque temen volver al sistema de carrera olímpica generando una fuerte inestabilidad laboral en el sector.
Incluso acusó a los parlamentarios que rechazaron la iniciativa de seguir este juego porque "no están pensando en el bien del país" e incluso amenazaron con sanciones electorales afirmando que si el proyecto finalmente es rechazado votarán nulo en las próximas elecciones. "Ya no confiamos en nuestros legisladores, porque la UDI por un par de toneladas de merluza austral hecha a las pailas todo el proyecto", enfatizó la dirigenta gremial.