Ecuador - Una comision prepara decreto para pesqueros

lunes 21 de noviembre de 2005

La Subsecretaría de Recursos Pesqueros analizará los pedidos de los gremios pesqueros que insisten en una protesta contra el Gobierno porque se sienten olvidados y desatendidos.

Ellos insisten en que se les permita comercializar al tiburón capturado incidentalmente y se retome el plan de reordenamiento de la pesca y acuicultura del 2002.

No obstante, sobre el primer punto existe el decreto 2130, vigente desde el 7 de octubre del 2004, en el que se prohíbe la venta y exportación de aletas de tiburón.

El subsecretario de Recursos Pesqueros, Boris Kusijanovich, cuestionado por los pesqueros durante una sesión que celebraron el jueves pasado, en Guayaquil, informó que actualmente una comisión especial elabora un proyecto de decreto que suprimirá al 2130 y en el que se plantean nuevas regulaciones de pesca.

Este documento estará listo a fines del presente mes, aunque aún no se conoce si se suprimirá la prohibición de captura de tiburón y la comercialización de sus aletas.

La palabra final la tendrá el presidente de la República, Alfredo Palacio, quien deberá aprobar el texto del nuevo decreto. Según Kusijanovich, en el recurso tiburón como en otras especies, “debe haber pesca sustentable y responsable, de manera que se cuide la biomasa de recursos para no provocar su desaparición”.

Pero los pesqueros de la Federación Nacional de Cooperativas Pesqueras Artesanales del Ecuador (Fenacopec) insisten en que se les permita vender los tiburones que se capturen de manera incidental, pues actualmente les provoca multas de parte de las autoridades de pesca.

La captura fortuita de escualos está permitida en la zona continental del Ecuador, pero, según el Decreto Presidencial 2130, no se puede comercializar en el país ni exportar, de tal forma que los pescadores solo pueden consumirlo.

Según datos de los propios pescadores nadie desperdicia un tiburón que cae en la red, si se tiene en cuenta que con el valor de las aletas ($ 10 un juego de cuatro) se puede cubrir el costo de su salida a pescar.

De acuerdo con el Banco Central (BCE), en los últimos cinco años el 83% de las exportaciones de aletas fueron a Hong Kong. Hasta septiembre del 2004, el envío de aletas de tiburón capturado incidentalmente era legal y unas 25 personas disponían de las licencias respectivas del BCE. Los comerciantes que no tenían autorización solían pagar un porcentaje para que alguien con licencia mandara la carga al exterior.