Fuente: La Voz de Galicia, Vigo

España - Argentina exprime a las empresas gallegas con nuevas tasas y restricciones pesqueras

jueves 14 de marzo de 2002

El Gobierno vuelve a relegar a la flota congeladora al sur del paralelo 48
con la excusa de proteger las poblaciones de merluza

El Gobierno argentino ha puesto contra las cuerdas a la flota congeladora de
capital gallego. Dos meses después de que el Ejecutivo bonaerense atendiese
su reivindicación de faenar en toda la zona económica exclusiva del país,
los nuevos nombramientos en la secretaría general de Pesca han supuesto un
serio revés a estas empresas, cuyos buques han sido relegados de nuevo al
sur del paralelo 48, la zona menos rica en merluza. Pero ante el cúmulo de
problemas, esa involución casi es «pecata minuta». Lo más duro es ese
«impuesto revolucionario» que grava las exportaciones con un 10% sobre la
facturación total.

«Tal y como están las cosas, no vemos salida». Así resume la situación un
empresario pesquero tradicionalmente optimista. Pero es que esta vez el
Gobierno bonaerense ha apretado demasiado las tuercas. La flota congeladora,
compuesta por noventa buques, de los que 60 tienen capital gallego, han
tenido que replegarse y volver al sur del paralelo 48, allí donde la merluza
no es tan boyante como en el área en la que operan los fresqueros de Mar de
Plata. Y lo peor es que el decreto regula la pesquería hasta finales de año,
con lo que se anula la posibilidad de que se levante esa prohibición en el
segundo semestre del 2002.
Si las restricciones en materia de área de actuación pesquera suponen un
problema para los congeladores, más grave es la aplicación de un impuesto
del 10% sobre la facturación total con el que el Gobierno argentino acaba de
gravar la exportación de determinadas mercancías, entre ellas el pescado
congelado, crustáceos y moluscos, tasa que «se cobra en dólares y por
anticipado».
Y es que el pago de ese 10% tiene que realizarse de forma previa al embarque
de la mercancía, depositando el importe en una cuenta antes de hacer oficial
el permiso de embarque, o de manera posterior, siempre que se deposite un
aval bancario y se abone la tasa en el plazo de tres días.
Los empresarios critican que el Ejecutivo se mueva por un simple «afán
recaudatorio», sin incentivar la producción ya que, de esa manera, «nunca se
reactivará la economía», dicen fuentes del sector. Las autoridades parten de
la base de que la devaluación de la moneda ha favorecido la exportación y,
por tanto, beneficiado a estas industrias: «No se paran a pensar en que, con
la nuevas tasa, frenan las inversiones y, por tanto, la creación de empleo»,
añaden las mismas fuentes.
Los empresarios alegan que, aunque la pesificación argentina ha reducido los
costes de exportación, el incremento del IPC derivado de la «brutal
especulación» ha elevado entre un 40 o 50% el coste de la producción. como
el combustible o el cartón. Además, aseguran que el dinero que el Estado
recauda a mayores «simplemente desaparece, no se ve».

ESPE ABUÍN (A CORUÑA)