Fuente: La Voz de Galicia, Vigo
España - Bruselas abre otra via para anular las subvenciones a la pesca
lunes 14 de julio de 2003
Fischler y Lamy se alían en un intento de poner fin a la «sobreexplotación de los caladeros»
Una sugerencia apoyada en las tesis de EE. UU., Japón y Corea
(Espe Abuín | redacción)
Bruselas quiere vencer en campo ajeno el partido que no fue capaz de ganar en casa. Si en diciembre las ambiciones de la Comisión Europea de eliminar o, al menos, reducir a la mínima expresión las subvenciones a la pesca se frustraron por la rotunda oposición del denominado grupo de Amigos de la Pesca (España, Francia, Italia, Irlanda, Grecia y Portugal), ahora ha decidido emprender la batalla contra los subsidios por otra vía. Y ha elegido el marco internacional para conseguir su objetivo. Así, la UE recurrió a la Organización Mundial de Comercio (OMC), foro al que la UE ha elevado una propuesta para conseguir una pesca sostenible.
Se trata de un plan que se sustenta en la convicción de que la solución al desequilibrio que existe entre el volumen de la flota y los recursos disponibles pasa «por la supresión completa de todas las subvenciones que incrementan la capacidad pesquera», una idea original del comisario europeo de Pesca, Franz Fischler, pero suscrita ahora también por su homólogo de Comercio, Pascal Lamy.
En la presentación de la propuesta, este último eurocomisario afirmó que, con la eliminación de los subsidios a la pesca, «podremos ayudar a hacer posible un futuro sostenible para los pescadores de todo el mundo», dijo Lamy, al tiempo que entroncó este objetivo con los compromisos adquiridos por la UE en la cumbre de desarrollo de Doha.
Contradicción
Según la propuesta de la UE, deben prohibirse todas las subvenciones que aumenten la capacidad de la flota, desde las ayudas para la renovación (construcción de buques o incremento de la posibilidad de extracción
pesquera) y los subsidios para exportar buques a terceros países, «incluso mediante la creación de empresas conjuntas con socios de terceros países».
Este último punto choca incluso con las últimas comunicaciones de la Comisión Europea, que en su propuesta de acuerdos internacionales de pesca sugería la necesidad de dar mayor peso a las sociedades mixtas como fórmula de cooperación y desarrollo.
La propuesta de la UE a la OMC apuesta por el mantenimiento de las ayudas que están orientadas a reducir la capacidad pesquera y disminuir las consecuencias sociales y económicas negativas derivadas de la reestructuración del sector. Así, Bruselas bendice aquel dinero público que se destina a desguace, paros temporales para recuperación de las especies o derivadas de catástrofes naturales, reconversión profesional de los pescadores, planes de jubilación anticipada y ayudas para mejorar la seguridad de los barcos.




