Fuente: La Voz de Galicia, Vigo

España - Bruselas garantiza la continuidad del modelo actual de acuerdos pesqueros

jueves 29 de mayo de 2003

-El conselleiro de Pesca recordó que Galicia lleva muchos años ayudando al desarrollo de terceros países -Carmen Fraga reprocha que se revisen sólo los pactos de interés para España

El responsable de política exterior de la Dirección General de Pesca de la Unión Europea, el coruñés César Debén, consiguió ayer en Vigo apaciguar un poco los ánimos del sector al afirmar que el actual modelo de pactos de pesca es perfectamente compatible con los futuros acuerdos de paternariado, esa nueva fórmula que ha ideado la Comisión Europea para conjugar en una misma política pesca extractiva, conservación del medio ambiente y cooperación al desarrollo de los terceros países.

El funcionario comunitario, que participó en una jornada organizada por la Federación Española de Organizaciones Pesqueras (Feope) sobre el futuro de los acuerdos internacionales de pesca, explicó ante decenas de armadores que «lo único que pretende Bruselas con los acuerdos de paternariado es abrir nuevos horizontes que permitan consolidar la actividad de la flota europea en aguas extracomunitarias haciendo que los europeos se impliquen en la economía local del país y contribuyan a su desarrollo».

Vertiente comercial

Pero ocurre que a la hora de elaborar esa mezcolanza, la UE se olvidó de un ingrediente básico: la vertiente comercial. Y así se lo reprochó ayer en Vigo la secretaria general de Pesca Marítima, Carmen Fraga, que recordó que, ante todo, la pesca es una actividad económica en la que el armador pretende ganar dinero: «Para España es prioritario que se mantenga el carácter comercial de los acuerdos y en la comunicación de la Comisión es un aspecto que ni siquiera se cita», dijo.

Fraga, que mostró abiertamente su desacuerdo con una propuesta demasiado «ambigua e incompleta», recriminó al Ejecutivo europeo que sólo haya entrado a revisar un tipo de acuerdos y que se trate precisamente de los que interesan a la flota gallega y española. Sugirió así que Galicia está siendo de nuevo víctima de las discriminaciones que Bruselas hace entre los países del norte y sur de Europa, una diferenciación que negó el director de política exterior de la UE al calificarla de «caduca». Según Debén, Bruselas pretende armonizar todos los acuerdos de pesca, independientemente de la situación de los países en el mapa de Europa.

La secretaria general de Pesca Marítima encontró un aliado en el eurodiputado portugués Arlindo Cunha, ponente del informe sobre el futuro de los pactos internacionales de pesca, que compartió con Fraga la convicción de que la Unión Europea otorga un tratamiento especial a los acuerdos de continuidad, «eufemismo que se emprega para os do norte» y los de paternariado, «reservados para los países del sur». Cunha se mostró partidario de separar claramente la política de pesca de la de cooperación al desarrollo, al menos en lo que a financiación se refiere.

Pero, sin duda, el mejor aliado que ayer tuvo la Administración española fue el conselleiro de Pesca, Enrique López Veiga, que, quizá arropado por la seguridad que da ver los toros desde la barrera -dado que la Xunta no tiene competencias en la materia-, se despachó a gusto contra la Comisión.

Críticas

López Veiga criticó que la CE nunca haya reconocido la labor de la pesca gallega en materia de cooperación al desarrollo y acusó al Ejecutivo europeo de intentan implantar el neocolonialismo al pretender decir a los países cómo deben gestionar sus recursos pesqueros. «Mire usted, primero arregle sus problemas en el mar del Norte y después hablaremos». dijo el conselleiro.

A su juicio, es deseable que la pesca deje de ser un sector excepcional y, al mismo tiempo, dijo que debe contribuir a la cooperación al desarrollo en la misma medida que otros sectores, como la minería o el petróleo.

Espe Abuín (redacción)