Fuente: La Voz de Galicia, Vigo
España - El sector augura que en cinco años no habra flota atunera europea
lunes 9 de junio de 2003
-El director general de Pesca reunió a los armadores en Bruselas para conocer sus problemas -Denuncian que las exigencias de la UE impiden a los buques españoles ser competitivos
En el plazo de cinco años, seis como mucho, no habrá flota atunera comunitaria». Así de contundente se muestra Julio Morón, gerente de la Organización Profesional de Grandes Atuneros Congeladores (Opagac), una de las organizaciones que ha participado en la reunión convocada por el director general de Pesca de la UE, Jorgen Holmquist, para analizar la situación del sector y de la pesquería del atún. Y «así de claro lo dejaremos a Holmquist: que las exigencias que impone la UE impiden que nuestros barcos sean competitivos», adelantó Morón antes de partir hacia Bruselas
La estocada definitiva para la flota atunera ha sido la entrada en vigor de la nueva política común de pesca, que suprime los subsidios públicos para la renovación de la flota de más de 400 toneladas de arqueo bruto (GT). Aparte de que no se permiten construir nuevos buques -puesto que la UE impide aumentar a los Estados miembros la capacidad de su flota-, el nuevo reglamento obliga a aportar 1,35 toneladas por cada una que se envíe al desguace, por lo que «ya no es suficiente con entregar el viejo atunero para chatarra, sino que, además, hay que comprar bajas adicionales o hacer un barco más pequeño y, por supuesto, pagar íntegramente la construcción del buque nuevo».
Demasiados requisitos
Pero no se trata sólo de eso. Los costes laborales, los requisitos sanitarios y las exigencias de certificados de navegabilidad, arqueo, máquinas y refrigeración no hacen más que acentuar la tendencia iniciada hace una década: «La de exportar el buque al registro de un país tercero o construir el barco bajo otro pabellón, en un registro en el que se permite hacer uno nuevo sin necesidad de aportar bajas», argumenta Morón.
Así las cosas, los armadores acuden a Bruselas dispuestos a decir alto y claro a la Comisión que «el futuro depende de si la UE quiere seguir teniendo flota atunera y de si va o no a propiciar las condiciones que permitan al sector ser competitivo». De otra manera, se acentuará la tendencia actual y, en el plazo de un lustro, no habrá atuneros comunitarios porque «no compensará seguir teniendo bandera española, francesa o italiana», únicos países europeos que actualmente tienen este tipo de flota.
El gerente de Opagac subraya que la apertura del mercado no se ha hecho en un plano de igualdad: «Desde 1974 está liberalizado el mercado del atún en todo el mundo y todos los países envían su atún a Europa, pero resulta que nosotros, por unas cuestiones u otras, no podemos exportar a Turquía, México, Estados Unidos y otros países comercialmente estratégicos que sí están colocando en España su atún. ¿Dónde está la igualdad de condiciones», denuncia Morón.
Espe Abuín (redacción)