Fuente: La Voz de Galicia, Vigo

España - La jornada laboral de los pescadores alcanza las ochenta horas semanales

lunes 22 de septiembre de 2003

Un informe de Trabajo admite que el descanso diario a bordo no pasa de 4 o 5 horas

La tasa de accidentes mortales de esta actividad es, de largo, la más alta de la UE.

Una esperanza de vida inferior a la del resto de profesiones

Armonizar la seguridad en la UE

(M. Blanco / L. C. Saavedra | redacción)

El mar dicta sus propias reglas laborales. Esta es una de las conclusiones principales de un informe del Ministerio de Trabajo sobre las condiciones de vida a bordo de los pesqueros españoles. El estudio, presentado en las jornadas sobre seguridad que se celebran en el marco de la World Fishing 2003, asegura que la jornada media de faena de un pescador alcanza las 80 horas a la semana.

El informe destaca que en este oficio no existen «horarios de trabajo, el ritmo lo marca el mar y las capturas». En este escenario, los técnicos del ministerio admiten que el descanso dominical es puramente teórico y que en las embarcaciones se labora tanto de día como de noche y casi siempre en la cubierta, lo que incrementa el riesgo de sufrir un accidente. «Los períodos de descanso en la jornada diaria no pasan de 4 o 5 horas continuadas».

Según Trabajo, a la intensa carga de trabajo, y al margen de los riesgos inherentes a la propia navegación (hundimientos, incendios, vías de agua...), se une un sistema de remuneración que obliga al pescador a un esfuerzo continuo. Y es que el sistema más extendido entre los barcos es el pago «a la parte», es decir, el salario depende de las capturas, «lo que supone una superación constante».

Por si fuera poco, el estudio analiza las condiciones de habitabilidad a bordo, que se encuentran ligadas al sistema de pesca y al barco. En este caso, analiza la situación de la flota artesanal (mayoritaria en Galicia y España), unos barcos «en los que los espacios son muy reducidos, cuando no exiguos. Los camarotes -continúa el informe- deben ser compartidos, por lo que la intimidad es inexistente. Las condiciones higiénicas son, en algunas ocasiones, precarias».

El oficio más peligroso

Las condiciones de vida y de navegación (en muchos casos extremas) han convertido la pesca en el oficio más peligroso de la UE. Así, Trabajo destaca que mientras en la actividad pesquera la tasa anual de accidentes mortales es del 2%, en el resto de profesiones consideradas de alto riesgo (minería o incluso agricultura) este porcentaje es del 0,3 por mil. Y va más allá al apuntar que la posibilidad de que un marinero sufra un accidente mortal a lo largo de su vida laboral es del 3% y se dispara hasta el 50% si se trata de un accidente grave.