Fuente: La Voz de Galicia, Vigo

España - Los expertos exigen el control de las capturas desde la extraccion a la venta

David Gippini

miércoles 27 de noviembre de 2002

-El congreso sobre pesca ilegal propone reforzar el papel de las organizaciones internacionales -Elcontrol de las importaciones parece ser la mejor arma contra el fraude

Los expertos lo tienen claro: la mejor forma de combatir la pesca ilegal es la identificación del producto desde el mismo momento de la captura hasta que llega al manos del consumidor. Así se puso de manifiesto ayer durante la jornada de clausura de la Conferencia Internacional sobre Pesca Ilegal celebrada en Santiago, en la que representantes de países con tanta tradición pesquera como Francia, Namibia o Noruega se mostraron partidarios de esta vía, denominada trazabilidad, durante una mesa redonda.

Según José Manuel Sobrino, profesor de Derecho Internacional de la Universidad de A Coruña y moderador del coloquio, la trazabilidad (certificar todos los pasos del producto desde que se pesca hasta que se
vende) es la única manera de garantizar que las capturas que llegan a los mercados son legales: «No sirve de nada que un país tome medidas si otros no lo hacen; no hay que olvidar que el pescado puede llegar al mercado español por carretera o por avión, no sólo a través de descargas en el puerto».

Por eso, los ponentes reclamaron que se establezcan controles que permitan saber siempre en qué puerto se realizó la descarga, quién la recogió, quien se responsabilizó del transporte y cuál es el destino final del producto.
Esta medida, además, daría satisfacción a una antigua reivindicación del sector pesquero, que se considera económicamente perjudicado a causa de la competencia fraudulenta.

Posibles sanciones

Otras de las medidas propuestas por los expertos consiste en la posibilidad de establecer un sistema de sanciones para los buques o los países que incumplan la normativa internacional. Pero no sólo para ellos, sino también para los puertos que permiten que se produzcan descargas ilegales. En opinión del profesor Sobrino, «difícilmente se podrá combatir la pesca fraudulenta mientras haya países o puertos que lo permitan; por eso, hay que aplicar la legislación internacional vigente, pero, además, hay que reforzar la cooperación internacional y establecer acuerdos entre los países».

Ayudas y cooperación

En este sentido, los ponentes recordaron las dificultades que supone para los países en vías de desarrollo establecer controles en todos sus puertos, ya que carecen de medios materiales y de personal cualificado para hacerlo.
Así, recalcaron la necesidad de establecer acuerdos de cooperación con los países pobres y de reforzar las competencias de las organizaciones regionales de pesca.

La jornada de ayer sirvió también para que Fernando Curcio, consejero de Pesca de la Representación Permanente de España ante la Unión Europea, presentara el Plan de Acción del Gobierno para combatir la pesca ilegal. En este programa se prevé la elaboración de listas negras de países y buques que incumplen las leyes, a los que se prohibiría descargar pescado en los puertos españoles.

Para Fernando Curcio, «el arma más eficaz contra la pesca ilegal es el control de los productos que se importan». Sin embargo, el ponente reconoció que esto «no permite garantizar al 100% que no entre pescado ilegal en el mercado español», entre otras razones porque un gran porcentaje de las importaciones se producen por vía aérea o terrestre. De ahí que el Gobierno se plantee la posibilidad de extender los controles a los aeropuertos y a las aduanas. De hecho, el Ejecutivo trabaja en la redacción de un paquete de medidas legales que permitirían reforzar la vigilancia.

En este sentido, el plan español tiene varios puntos en común con las recomendaciones surgidas del congreso celebrada en Santiago. En sus conclusiones, los ponentes insistieron en la necesidad de reforzar los controles y también en la conveniencia de elaborar listas de países o de buques, tanto positivas (que incluiría a los más respetuosos con la
normativa) como negativas.

David Gippini (santiago).