Fuente: Actualidad Terra, Madrid

España - Oceana promueve la instalacion de arrecifes artificiales para combatir la pesca de arrastre

martes 5 de julio de 2005

La Organización de Defensa del Mar Oceana promueve la instalación de arrecifes artificiales para combatir la pesca de arrastre, después de estudiar el impacto que tienen los arrastreros que faenan ilegalmente en aguas de Mallorca y otras zonas del Mediterráneo. Esta medida ya la ha puesto en marcha la Generalitat de Cataluña, la Junta de Andalucía y la Generalitat Valenciana.

Investigadores de la organización internacional han estudiado distintas zonas de la plataforma continental de la Isla de Mallorca a bordo del catamarán Ranger y han comprobado el nivel de impacto causado por los barcos de arrastre que faenan ilegalmente, informa Oceana en un comunicado.

El objetivo de las investigaciones es hacer un seguimiento de las barreras de arrecifes artificiales ya instaladas contra este tipo de pesca y evaluar la conveniencia de apoyar e impulsar nuevos proyectos en esta misma línea.
El catamarán Ranger es el primero de los proyectos que Oceana pone en marcha en el Mediterráneo desde que, el pasado día 25, la embarcación llegase al puerto de Palma tras una expedición transoceánica de seis meses de duración.

'La legislación española prohíbe a los barcos de arrastre que faenen a menos de 50 metros de profundidad, para preservar los ecosistemas marinos de alta biodiversidad que actúan, además, como áreas de reproducción y cría de numerosos animales marinos, incluidos peces que posteriormente son objeto de explotación comercial', señala la organización en la nota.

Sin embargo, Oceana considera que este límite establecido en la ley es 'demasiado permisivo' y que en realidad el impacto de la pesca de arrastre debería ser eliminado 'de toda la plataforma continental, que se extiende hasta los 200 metros de profundidad'.

Además, denunció que incluso 'la tolerante legislación existente' se incumple. 'Con motores de potencias mucho más altas que las declaradas y permitidas por la ley, los barcos de pesca de arrastre, con sus pesados aparejos cargados de puertas de metal y cadenas para 'arar' el fondo marino se introducen dentro de las zonas prohibidas y destruyen los valiosos ecosistemas costeros', manifestó el oceanógrafo Xavier Pastor, director para Europa de la organización conservacionista.

Oceana ha comprobado que los barcos sólo se detienen ante la presencia de cuatro barreras de arrecifes artificiales, formados por cerca de 200 módulos, pesadas estructuras de hormigón dotadas de unos salientes en los que quedan enganchadas las redes de los barcos que pretenden pescar en áreas protegidas.

Su utilización se ha generalizado con éxito desde los años 80 como una alternativa a la incapacidad de la administración de llevar a cabo de forma eficaz la vigilancia de las zonas de pesca prohibida. El Govern Balear, siguiendo iniciativas como las puestas en marcha hace unos años en la Bahía de Palma y como las llevadas a cabo por la Generalitat de Cataluña, la Junta de Andalucía y la Generalitat Valenciana, tiene previsto ubicar en esa zona un campo de arrecifes artificiales anti-arrastre, formada por tres barreras conteniendo un total de dos centenares de módulos.

Para Oceana, se trata de una iniciativa 'muy positiva' que, a su juicio, debería extenderse a muchos otros lugares del Mediterráneo, mientras que se avanza en conseguir eliminar la pesca de arrastre o en su restricción a lugares muy específicos en los que se pueda demostrar que su impacto sobre los ecosistemas marinos es 'mínimo'.