España - Pesca dice que la campanha sismica de Repsol afectara al uso del caladero

miércoles 19 de enero de 2005

El estudio previsto implica la retirada de aparejos fijos y limitaciones a la flota

E. C./GIJÓN

NASAS. Preparación de artes fijas, que serán las más afectadas por las pruebas, en Ribadesella. / E. C.
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El estudio que Repsol ha programado para detectar bolsas de gas explotables en aguas próximas al litoral oriental asturiano tiene dos vertientes no antagónicas, pero tampoco exactamente coincidentes: la medioambiental y la pesquera.

Sobre los posibles efectos en la actividad de los pescadores, fuentes de la Consejería de Medio Rural y Pesca indicaron ayer a este periódico que el proyecto «perjudica al uso pesquero del caladero», sin entrar a analizar la posible repercusión en especies marinas no comerciales.

La investigación promovida por Repsol se desarrollará en una superficie de unos 1.380 kilómetros cuadrados comprendida entre las verticales de Lastres y Bustio, aproximadamente. Las características de la prueba obligan a tener la zona de estudio libre de aparejos fijos durante aproximadamente dos meses, que es el tiempo estimado para la labor de campo del estudio.

Pesca destaca que esa ocupación del caladero supone ya un perjuicio, que afecta también a la flota que no trabaja con artes fijos.

La razón es que el barco sísmico tendrá su maniobrabilidad mermada, debido a que arrastrará por popa un mínimo de seis cables de 6.000 metros de longitud y a una profundidad de siete metros. En esas condiciones, los demás barcos que naveguen por la zona, sean pesqueros o no, deberán dejar paso al barco sísmico, dejando un margen mínimo de seguridad de cinco millas náuticas por popa y dos millas náuticas por estribor y babor.

La restricción de la actividad pesquera advertida por el Gobierno regional no es ocultada por Repsol, que ya contactó con la Federación Provincial de Cofradías de Pescadores con vistas a alcanzar un acuerdo de operativa que depare los menos perjuicios posibles. Repsol cree «muy importante» la presencia a bordo del barco oceanográfico que contrate de «un representante del sector pesquero, con gran conocimiento del detalle de las actividades pesqueras de la zona, para que coordine las operaciones de registro con el representante de Repsol YPF y que inspeccione que las labores de registro se lleven a término convenientemente para todas las partes».

En todo caso, los pescadores han manifestado ya su preocupación por la retirada de aparejos en un área que incluye, total o parcialmente, siete caladeros tradicionales.

Desde el punto de vista medioambiental, Repsol indica que «de acuerdo con la recomendación del informe Medioambiental realizado, se contratará a un biólogo especializado en cetáceos como observador de mamíferos marinos, para que en cada momento supervise que las labores de adquisición de la sísmica se llevan a término de acuerdo con las recomendaciones y procedimientos para salvaguardar la vida marina» conforme a los criterios fijados por las organizaciones competentes.

El trabajo puede ser comprometido por los polémicos antecedentes de investigaciones similares. En ese sentido, el director de la Coordinadora para el Estudio y Protección de las Especies Marinas (Cepesma), Luis Laria, dijo a este periódico que la organización que representa permanecerá al margen del proyecto, a fin de salvaguardar su independencia.