Fuente: La Voz de Galicia, Vigo
España - Pescanova invierte 50 millones encrear la mayor planta de rodaballo de Europa
martes 13 de mayo de 2003
-La granja ocupará 300.000 metros cuadrados del cabo Touriñán y comenzará a realizarse este mismo año -Intentará multiplicar por seis su producción en el plazo de cuatro años
Pescanova comenzará antes de finales de año las obras de una nueva planta de acuicultura ubicada en Touriñán (en el municipio de Muxía), que estará operativa en el verano del 2004 y se convertirá en la planta de rodaballo más grande de Europa.
El proyecto, que la multinacional pesquera desarrolla a través de su filial Insuíña, fue presentado ayer en Muxía en un acto en el que, además del presidente de Pescanova, Manuel Fernández Sousa, y el gerente de Insuíña, Enrique de Llano, estuvieron presentes el presidente de la Xunta, Manuel Fraga, el presidente de la Diputación de A Coruña, José Luis Torres Colomer, el conselleiro de Pesca, Enrique López Veiga y el alcalde de la localidad, Alberto Blanco.
Pescanova invertirá en el desarrollo de la obra un total de 50 millones de euros y ocupará una superficie de 300.000 metros cuadrados. Según comentó Enrique de Llano, la nueva planta tiene como objetivo llegar a una producción estable de 4.000 toneladas por año a partir del 2007. Esto es, multiplicar por seis la cantidad de rodaballo que ahora sale de sus criaderos.
Previsiones
Las previsiones de la empresa pasan por comenzar el engorde del rodaballo en Muxía a partir del próximo verano, para ir aumentando progresivamente la producción hasta estabilizarse a partir del año 2007. De este modo, se calcula que de Touriñán saldrán 190 toneladas en el año 2004; 1.555 en el 2005; algo más de 3.000 en 2006; y se alcanzán las 4.000 en el cuarto año.
Los primeros habitantes de la planta de la Costa da Morte serán cuatro millones de alevines de rodaballo, de 50 gramos de peso, que saldrán de las instalaciones que Insuíña explota en Mougás.
Aunque la granja se destinará en principio a la cría de rodaballos, la empresa estudia también la posibilidad de ampliar el negocio en un futuro al lenguado, cultivo para el que ya se está tramitando la autorización.
Emplazamiento
Entre los motivos que llevaron a Pescanova a ubicar su nueva planta en Muxía, el presidente de la multinacional destacó la calidad de las aguas y el escaso impacto que tendrá la obra, una vez terminada, en el entorno de Touriñán. Con este último extremo discrepa abiertamente la asociación ecologista Adega, que ayer denunció ante el Seprona el inicio de las obras por carecer de licencias.
Entre los argumentos para elegir el emplazamiento de la macrogranja no podían faltar las consecuencias del Prestige y así lo manifestó
Fernández-Sousa: «Pescanova luchó contra el chapapote primero y contribuirá ahora a dinamizar la economía de la zona», dijo.
Al Prestige se refirió también Manuel Fraga, quien mostró su satisfacción por el hecho de que «unha empresa da seriedade e da solvencia de Pescanova elixa precisamente Muxía, corazón da chamada zona cero, para desenvolver o seu máis ambicioso proxecto de acuicultura, pois esa decisión constitúe a proba máis palpable de que a superación do problema está garantida». Manuel Fraga también aseguró al presidente de la multinacional gallega que la obra no se retrasaría a causa de permisos y otras cuestiones técnicas.
Según cálculos de la empresa, una vez finalizada su construccción, la factoría generará un total de 450 puestos de trabajo directos e indirectos.
Sobrada experiencia
Insuíña, que inició su andadura en 1983, ha desarrollado tecnologías muy avanzadas en acuicultura y actualmente cuenta con modernos centros de cría y reproducción de especies como el rodaballo, la lubina y la dorada. Sus criaderos disponen de una capacidad para siete millones de alevines y una producción de 600 toneladas, que se comercializan, a través de Pescanova, tanto en el mercado nacional como en el europeo.
Eduardo Eiroa (muxía)




