Fuente: La Voz de Galicia, Vigo

España - Rabat presenta imagenes del Viduido con la red en el agua

viernes 13 de septiembre de 2002

-El armador alega que el barco tuvo un problema con la hélice -Las negociaciones para establecer la cuantía de la sanción están a punto de cerrarse

El Gobierno de Rabat acusa al buque congelador Viduido, perteneciente a la empresa gallega Bordavila, con sede en Cangas y Vigo, de haber faenado ilegalmente en sus aguas en febrero del año 2001. Para fundamentar los cargos que imputa al pesquero, se apoya en una fotografía en la que se aprecia al barco con los cabos de la red sumergidos en el agua.

Aunque el armador niega tajantemente los cargos y afirma que el buque no estaba pescando, lo cierto es que Marruecos va a por todas. De poco ha servido la alegación del empresario, que afirmó que las cuerdas que aparecen reflejadas en la imagen no son de redes de pesca, sino que se utilizaron para solucionar un problema que la embarcación tuvo en la hélice, el Gobierno marroquí no acepta las explicaciones y está dispuesto a llevar el caso a los tribunales.

Negociaciones avanzadas

En este sentido, fuentes diplomáticas revelaron que la vía judicial parece poco probable, pues ayer el armador estaba cerrando los últimos flecos de la negociación. Además, esa solución no satisface al empresario, por no ofrecer garantías de imparcialidad.

Las mismas fuentes explicaron que lo más probable es que el propietario del buque acepte la multa previamente pactada y firme un documento mediante el que reconoce la infracción y comprometiéndose a no reincidir en la falta.

El pesquero gallego fue apresado el 1 de septiembre, después de haber abandonado el caladero de Mauritania, en el que un día antes había entrado en vigor el paro biológico, y se dirigía al puerto de Las Palmas para descargar la mercancía, 140 toneladas de diversas especies de pescados y cefalópodos. La carga estaba valorada en unos 360.000 euros (alrededor 60 millones de pesetas).

Evitar el paso

El Gobierno español mantiene en pie su recomendación de evitar la navegación por aguas jurisdiccionales marroquíes y de extremar las precauciones en el caso de que, por imperativo deban atravesar la zona económica exclusiva del país. De todos modos, fuentes diplomáticas aseguran que en el puerto de Dajla hay un fuerte movimiento de entrada y salida de buques españoles para abastecerse sin que, hasta el momento, se haya registrado ningún problema.
Sin embargo, sí ha habido conflictos en el caso de pesqueros que navegaban en ruta hacia el puerto de Las Palmas para descargar la mercanacía.

La Administración española retomará la propuesta que realizó a Marruecos durante las negociaciones para renovar el acuerdo pesquero y que el Gobierno de Rabat ni siquiera contestó. En este sentido, el Gobierno plantea facilitar a las autoridades marroquíes un listado de embarcaciones que faenan en zonas próximas al banco canario-sahariano para que Rabat tenga una garantía de que están utilizando el derecho de paso inocente que garantizan las normas internacionales de navegación. El Ejecutivo espera tener más éxito que en la ocasión anterior y que, al menos, Rabat comunique si acepta o no este planteamiento.

Reunión con Benaissa

Fuentes diplomáticas desconocían ayer si el caso concreto del Viduido será objeto de debate en la reunión que mantendrán los responsables de Exteriores español y marroquí en su encuentro, «aunque Fraga confíe en que así sea».

Lo que sí es cierto es que la cuestión pesquera sí entrará en la agenda, junto con el problema de la inmigración y el tráfico de drogas.