
Fuente: La Voz de Galicia, Vigo
Espanha - Pescanova alerta de que el colapso del puerto de Vigo provocará deslocalizaciones a corto plazo
miércoles 23 de mayo de 2007
Directivos del grupo Pescanova advirtieron ayer de que la demora en la gestión de los contenedores que llegan al puerto de Vigo está provocando graves pérdidas a las empresas e, incluso, la anulación de algunas operaciones comerciales. El escaso personal del Puesto de Inspección Fronteriza (PIF), pendiente desde hace un año de incorporar a ocho inspectores, está provocando medias de hasta siete días de espera para la gestión de cargas, cuando la mayoría de los puertos españoles gestionan estos permisos en plazos de 24 y 48 horas.
Ayer, Vigo tenía 250 contenedores acumulados, una situación que las compañías definen como «colapso técnico».
Jesús García, consejero de Pescanova, señaló que el problema se agravará en verano, con el turno de vacaciones de los inspectores. En su opinión, las demoras podrían provocar deslocalizaciones hacia otros puertos que no presenten estas carencias operativas.
La protesta de la multinacional gallega se suma a las quejas de asociaciones como la patronal conservera, Anfaco, la Confederación de Empresarios de Pontevedra o de entidades que operan habitualmente en las dársenas viguesas, caso de los armadores de Vigo (Arvi) o de las empresas frigoríficas de Pontevedra (APEF). Puertos alternativos, como Oporto o Marín, ya han recibido en los últimos meses cargas que, en principio, iban destinadas a Vigo.
García señaló que sus contenedores tardan un mes en llegar desde Argentina a Algeciras. «Con los retrasos, desde que llegan de Algeciras hasta que salen de Vigo, transcurre casi otro mes». «Es una situación insostenible para las empresas, que trabajan con clientes, mercados y productos que no pueden esperar», señaló el portavoz de Pescanova.
La Autoridad Portuaria anunció ayer que el puesto de control aduanero y sanitario de las mercancías de origen animal procedentes de terceros países incorporará la próxima semana un nuevo inspector. El puerto se niega a hablar de colapso y alude a una «situación puntual» para referirse a la acumulación de contenedores, por la coincidencia de un festivo la pasada semana y la presencia de un buque oceánico en la costa.
A final de año está previsto incorporar los ocho inspectores sanitarios. Los responsables portuarios apelaron a la «sensatez» para no «desatar alarmas innecesarias» hasta entonces.