Fuente: La Prensa, Ciudad de Panama

Panama - Cuidado con la politizacion del Canal

jueves 17 de octubre de 2002

Rubén Darío Paredes

De repente, observando a nuestro canciller y precandidato presidencial del oficialismo, José Miguel Alemán, a través del Canal 21, me asaltó una preocupación ya que éste dejó escapar sin disimulo que entre las obras de impacto pre-electoral más importante que el Gobierno contempla echar a andar para captar la simpatía de la masa electoral, están el "Miss Universo" y la "modernización del Canal o construcción del tercer juego de esclusas".

Este mega proyecto del tercer juego de esclusas se iniciaría temprano en el 2003, precisamente cuando entra en ebullición la campaña política para las elecciones del 2004. Mi preocupación de fondo al analizar la postura del caballeroso canciller, es que confirmó la sospecha generalizada de que a la mayoría de los funcionarios que integran la cúpula del gobierno, poco les interesa o no han encontrado la pausa necesaria, por estar inmersos en medio de otras tareas oficiales, para compenetrarse y estudiar las complejidades inherentes al universo del Canal de Panamá.

Esta falta incomprensible de supervisión, por parte del poder ejecutivo, está siendo capitalizada por los administradores de la ACP, quienes la han aprovechado para imponer a espaldas del propio Gobierno y de la ciudadanía, alternativas inconsultas, caprichosas, que podrían acarrear graves consecuencias para nuestra República. Un ejemplo de lo anterior es el
siguiente: El día 6 de noviembre del 2001, la presidenta, Mireya Moscoso, en cadena nacional desde el salón Amarillo del Palacio, en ocasión de la presentación del documento "Del aporte de un consenso nacional sobre el futuro del Canal", por parte de un grupo de ciudadanos prestigiosos, coordinados por el ex presidente Ricardo Arias Calderón, se expresó así: "En nombre del Gobierno nacional quiero agradecerles este valioso aporte, que viene a contribuir de manera oportuna al análisis de uno de los temas que mayor importancia tiene para el futuro de la Nación panameña, como lo es el Canal de Panamá...". Y concluyó de la siguiente manera: "Llegó la hora de que los panameños sin distingos de clases o banderías políticas comencemos a sentar las bases para un diálogo abierto, franco y respetuoso, que admita todas las ideas y posibilidades que den lugar a una decisión que favorezca en su conjunto a toda la Nación".

Lamentablemente hoy, un año después de aquel acto de tanta seriedad y trascendencia nacional, la ACP, por el contrario, se ha sumergido mucho más en su actitud permanente de oposición y reticencia para dialogar sobre el destino del Canal. Un año ha transcurrido desde aquella ceremonia y la ACP no da la cara.

Sin embargo, en el tiempo transcurrido, la ACP firmó un contrato millonario con el Cuerpo de Ingenieros del Ejército de EU para el diseño de las esclusas y compuertas del modelo "Post-panamax" sin ninguna consulta al país. Además, se están realizando trabajos de agrimensura en el corazón de la cuenca, para fijar las cotas de niveles y sitios de presas. Todo este avance, que viola nuestra Constitución en su Artículo 319, el cual exige un "referendo democrático" para estos menesteres, ocurre aparentemente en el desenfreno político que se avecina y por una capitalización mutua de intereses.

Agreguémosle a esta situación ya planteada otros intereses que presionan para que se inicien cuanto antes los trabajos de la ampliación del Canal, y estos son comprensibles; me refiero a los de la empresa privada: vendedores de maquinarias y equipo pesado, empresas constructoras, consorcios de capitales que ofrecen grandes financiamientos, la banca mundial, las naciones industrializadas que cazan mercados donde venden sus tecnologías de construcción de primer mundo, etc.

Retomando la participación del canciller José Miguel Alemán en el canal de televisión, éste justificó la urgencia de iniciar los trabajos cuanto antes de la ampliación de nuestro Canal debido a que, según dijo, observó en los astilleros de la Hyundai en la República de Corea, que se estaban construyendo 40 barcos "Post-panamax", los que por sus dimensiones no podrían transitar por nuestro Canal. El quiso decir que había que ampliar prontamente la vía para que estas naves pasaran por nuestro istmo. Quizá nuestro canciller ha olvidado que estos grandes barcos que él observó en los astilleros de Corea, son embarcaciones especializadas para mover carga desde Australia a Oriente y Asia, y cruzar el Canal de Suez cuando cubren rutas hacia Europa. Nada indica ni asegura que dichos barcos cruzarían por nuestro Canal, aunque este se ampliara hoy. Sin embargo, actualmente el 75% de la flota mercante mundial es modelo Panamax, la cual puede transitar y transita por el Canal de Panamá; y son casi todas naves jóvenes con 100 años de vida por delante.

Finalmente, sugeriría al amable ministro Alemán que pida información en el Tribunal Electoral para que se oriente sobre la obligatoriedad de cumplir con el mandato constitucional claramente expresado en su Artículo 319, antes de dar "la orden de proceder para iniciar los trabajos de modernización del Canal".


El autor es ex ministro del MIDA