Fuente: El Comercio, Lima
Peru - Es posible considerar cuotas individuales para la anchoveta
sábado 14 de mayo de 2005
El titular de la cartera de Producción asegura que la cuestionada pesca exploratoria realizada en abril pasado no pondrá en peligro la disponibilidad del recurso para el 2006
El año anchovetero empezó con complicaciones de todo tipo. Desde una veda que se prolongó demasiado hasta una presencia inusualmente alta de juveniles, pasando por la posibilidad, siempre temida, de un fenómeno de El Niño. Entre otros temas, David Lemor, ministro de la Producción, habla del manejo de las vedas, la cuota individual para la pesca anchovetera y el fomento de otras pesquerías subutilizadas que permitirían, eventualmente, retirar la presión que hoy existe sobre la anchoveta.
Usted ha señalado que el 2005 sería un año auspicioso debido a la biomasa estimada, muy superior a la del 2004. ¿Cómo se ven afectadas esas proyecciones ante un posible fenómeno de El Niño y la eventual prolongación de la veda debido al alto porcentaje de juveniles?
No puedo hacer un pronóstico. La composición de la biomasa, calculada este año en 12.700 millones de toneladas, hace augurar un buen año para la pesca, pero siempre existen los imponderables del clima y el tema de las vedas como mecanismo para no destruir el recurso.
¿Es un año complicado para el sector?
Relativamente complicado. El clima y la alta incidencia de juveniles perjudicaron la pesca. Hubo que declarar veda y lo haremos siempre que haya incidencia de juveniles (anchoveta por debajo de los 12 cm; por ley, su extración no debe exceder el 10% de los desembarques diarios). No estoy seguro de que alcancemos los niveles del año pasado, pero no olvidemos que este problema se está dando en la primera campaña del año y que todavía falta la segunda campaña. En todo caso, esto se va a manejar técnicamente, preservando el recurso.
Justamente se ha criticado la demora del ministerio en suspender la reciente pesca exploratoria, cuando Imarpe detectó una presencia de juveniles mayor al 50%...
En la pesca exploratoria salen todas las naves a pescar por un período de diez días, tiempo en el cual se extrae el recurso y se examina la composición y el porcentaje de juveniles. Pero toma un tiempo determinar la estadística completa de todas las naves que desembarcaron en esos diez días, porque hay que ver dónde pescó cada nave y cuál era el porcentaje de juveniles en las zonas donde se pescó. No importa dónde se desembarcó, sino dónde se pescó. Es muy fácil saber cuántos juveniles llegaron al puerto de descarga, pero eso no indica necesariamente en qué puntos hay que cerrar la pesca.
Pero Imarpe había señalado desde los primeros días de esta pesca exploratoria que, en promedio, más del 50% de la carga eran juveniles.
¿Había que esperar para decretar el cierre de la pesca exploratoria?
No importa el promedio, importa la zona donde está la concentración para tomar la decisión. Una decisión tomada en base a esa información sería errada porque estaríamos dejando el recurso adentro, poniendo en riesgo la campaña pesquera y a los que se dedican a esta actividad.
¿Se ha señalado que en esos diez días de pesca exploratoria se pescaron 1,5 millones de toneladas, de las cuales el 50% serían juveniles. ¿Cómo podría afectar eso la pesca del 2006?
No la afecta. Porque un 50% promedio de juveniles no significa que se pescó ese porcentaje en toda la costa. Hubo zonas en donde se pescó 10% o menos de juveniles, y esas zonas no hay por qué cerrarlas. En este momento estamos en período de pesca. Hemos abierto las zonas donde el recurso estaba saludable; y hemos abierto por unos días la pesca en zonas en donde, después de la pesca exploratoria, no teníamos información, para ver cómo está el recurso, y dentro de esa zona, que es de 6° a 10°30', vamos a ir evaluando y cerrando aquellos grados donde haya una concentración peligrosa de juveniles.
Sin embargo, en el 2002 el exceso de extracción de juveniles devino en una muy mala campaña al año siguiente...
El 2003 fue una mala campaña pesquera, no hubo suficiente para pescar. Pero eso no pasará esta vez. No permitiremos que la pesca de juveniles ponga en riesgo la biomasa.
Personas vinculadas al sector pesquero señalan que existiría presión por parte de algunos empresarios preocupados porque las vedas ponen en riesgo su capacidad para cumplir con contratos de exportación y el pago de sus deudas...
Rechazo la presión, todo es técnico. Respeto a los académicos, pero ellos están detrás de un escritorio y no en el mar. La deuda se está reduciendo y se va a seguir reduciendo. Hay una perspectiva positiva respecto al futuro de la pesca en el Perú.
Se critica el ingreso de las llamadas embarcaciones 'vikingas'..
Efectivamente. Generan un exceso de bodega y eso hace que se pesque lo mismo en menos tiempo, aunque eso no quiere decir que se ponga en riesgo la biomasa. Lo que origina son períodos más cortos de pesca, con vedas más largas.
¿Es una posibilidad el sistema de cuotas individuales para la pesca de anchoveta?
La cuota se aplicó en el caso de la merluza y funcionó. Las cuotas individuales obligan a racionalizar al interior de las empresas, a pescar con las embarcaciones más eficientes. Desde que asumí la cartera, estudié el tema y es una solución posible de considerar. En Chile se ha aplicado y se ha racionalizado la pesca.
¿Hay iniciativas para desarrollar otras pesquerías y diversificar el riesgo de un solo recurso?
Las empresas deben diversificarse, dejar de poner todos los huevos en una sola canasta. La anchoveta es estacional, tiene largos períodos de veda. Por eso estamos abocados a la modificación de la legislación a fin de fomentar la pesca para consumo humano directo. Por ejemplo: para fomentar la pesca del atún, que estamos subutilizando en estos momentos. La legislación pesquera establece que los barcos atuneros deben pagar 30% de Impuesto a la Renta sobre el valor de la factura. Esa es una barrera.
¿Hay inversión extranjera a la vista en el sector?
Están los chilenos, los rusos, hay muchos interesados. Pero hay un impedimento para la participación de flotas extranjeras en pesca de altura, más allá de las 50 millas --y estamos perdiendo una parte de lo que podríamos lograr como país en desarrollo en el sector. Hay que superar estos impedimentos y ponerle candado a las probables infracciones que podrían darse. La embarcación extranjera que pesca en el Perú tiene que hacerlo bajo la legislación peruana.
Cecilia Niezen




