Fuente: El Peruano, Lima

Peru - Pesca amazonica: Pesca del futuro

jueves 4 de diciembre de 2003

El Instituto de Investigaciones de la Amazonía Peruana lidera una de las iniciativas más auspiciosas de desarrollo para esa zona del país. Los resultados obtenidos hasta hoy dan claras muestras de que la acuicultura es aún una mina a la espera de mayor apoyo.

Texto y Fotos: Karina Garay R.

Los mares no son los únicos paraísos en que los peces pueden transformarse en panacea de desarrollo y fuente inagotable de alimentos para la población.
La Amazonía increíblemente también puede serlo a través de la acuicultura, tal y como lo demuestran algunas experiencias en nuestra selva peruana.

Para Fernando Alcántara, del Instituto de Investigaciones de la Amazonía Peruana (IIAP), la acuicultura es una actividad más que prometedora para la Amazonía peruana, es la ideal.

Debido a lo disímil de su territorio, "sólo la selva alta presenta condiciones para la agricultura y ganadería intensivas; sin embargo, eso no sucede con el llano amazónico (selva baja), de suelos pobres y abundancia de lagunas, lagos y quebradas. Aquí el recurso más abundante es el agua, y es sobre la base de ella que hay que encontrar formas de desarrollo", afirma.

La acuicultura es la actividad que permite obtener producción por medio del cultivo de organismos acuáticos, tanto animales como vegetales. Este proceso productivo puede iniciarse desde la selección de los organismos reproductores hasta obtener las "semillas" que permitan una posterior "siembra" de peces, o desde las etapas controladas de recría o preengorde y engorde final.

Regiones como Loreto, San Martín y Ucayali han empezado ya a cosechar los frutos de esta interesante actividad, gracias a diversos proyectos de investigación desarrollados desde hace dos años por el IIAP.

En este momento suman 240 las unidades familiares asentadas en las carreteras Iquitos-Nauta (Región Loreto), Federico Basadre (Región Ucayali-San Martín) y Fernando Belaunde (Región San Martín), las que se han convertido en beneficiarias de la tecnología desarrollada por el instituto, cuya transferencia fue posible gracias a la ayuda de instituciones como la Unión Europea, USAID y Biofor, entre otras, refiere Salvador Tello, director del programa de ecosistemas acuáticos del IIAP.

Secretos develados

A modo de una agricultura en agua, la acuicultura también tiene sus características y sus secretos, los cuales fueron develados durante cinco años de trabajo por especialistas del IIAP, ahora puestos a disposición de quien quiera darle mayor proyección.

De este modo, se realizaron estudios biológicos que han permitido conocer las características del ciclo de reproducción de las especies más comunes de la zona, así como el cruce novedoso de algunos ejemplares, como la gamitana y el paco.

Gracias a los primeros estudios se logró determinar cuáles son las especies (gamitana, paco, boquichico, sábalo) que requieren salir al río para completar su ciclo de reproducción y cuáles no (paiche).

Para contrarrestar las dificultades de cultivo que planteaba el primer grupo de expertos del IIAP, lograron imitar en el laboratorio las condiciones naturales necesarias para la fecundación y el desove de estas especies.
En este momento el Centro de Investigaciones de Quistococha (Iquitos), que es donde se logró desarrollar toda esta tecnología, posee 25 pozas de agua en tres hectáreas de espejo de agua, en las que se desarrolla todo el proceso de cría de las especies hasta la llegada de los alevinos.

"Creo que llegó el momento de hacer cambios. Hace año y medio estuve en una reunión en el río San Lorenzo con 22 dirigentes de federaciones indígenas y allí nos dijeron que estaban cambiando sus costumbres. Si antes se desplazaban por todo el territorio en busca de recursos, ahora se están estableciendo en ciertos lugares por la posta médica y la escuela", comenta Fernando Alcántara, responsable del centro

"Es así como surgen necesidades de alimentación más agudas que antes. En este momento es importante para promover ideas de cultivo de recursos que estén al alcance de ellos. La gente que ha venido de Amazonas aprecia el pescado, pero no lo tiene. Su oferta en el ambiente natural es muy baja debido a que los peces no pueden remontar la fuerte corriente del Marañón.
En estos casos, por ejemplo, se debe promover la acuicultura", dice.

Salvador Tello comenta, por su parte, que si en un primer momento ellos, además de transferir la tecnología necesaria para construir los estanques en donde se cultivan los peces, regalaban los alevinos, ahora los pobladores los compran, además de haber empezado a incrementar el número de sus pozas.

"Antes estuvimos preocupados en cómo lograr que estos beneficiarios pasen de productores pequeños a microempresarios, pero vimos que eso se dio de manera natural", refiere.

"En la época de creciente del río, en que no hay pescado, ahora estas familias se benefician de sus cultivos de gamitana, cuyo kilo de carne en el mercado cuesta siete nuevos soles. Con el dinero que obtienen de la venta en cantidad compran boquichicos de menor precio para su consumo, quedándoles un saldo para otros gastos. Ellos se dan cuenta de que esa actividad les puede generar una renta", dice.

Para Fernando Alcántara, "todavía no se ha entendido que la acuicultura es una inversión que el Estado tiene que hacer, ya que a mediano plazo va a traer mucho beneficio a la Amazonía peruana.

"El paiche, por ejemplo, debido a su filete de óptima calidad, al carecer de espinas intermusculares, tiene una gran demanda en Estados Unidos, Alemania, Suiza e Inglaterra. En el mercado de Iquitos el kilo puede llegar a costar entre 15 y 18 soles y su potencial es tan alto que no es una exageración pensar en la exportación. Pero para que esto se dé es imprescindible contar con el apoyo multisectorial e interinstitucional que refuerce lo avanzado hasta ahora", enfatiza.