Fuente: Atlantico.net
España- La alimentación del futuro se forja en Vigo
lunes 24 de febrero de 2025

España- La alimentación del futuro se forja en Vigo
Investigación alimentaria
El centro de investigación de Anfaco avanza en tecnologías ómicas para nutrición de precisión y en toda la innovación para empresas alimentarias
23 feb 2025
Atlantico.net
https://www.atlantico.net/vigo/alimentacion-futuro-forja-vigo_1_20250223-3422569.html
Una de las investigaciones punteras del Cytma en acuicultura es la producción de microalgas para alimentación de bivalvos, pescados o incluso cosméticos.
La máxima “somos lo que comemos” guía la investigación del Centro de Tecnologías Avanzadas de Investigación para la Industria Marina y Alimentaria (Cytma), que Anfaco tiene en el campus de Marcosende, con su foco en ayudar a las empresas a mejorar productos y procesos, porque “la innovación es la palanca de cambio”. El centro pronto cumplirá una década y cuenta con un centenar de profesionales de alta cualificación.
Roberto Alonso, secretario general de Anfaco-Cecopesca, explica que “somos una entidad singular, una mezcla de asociación, centro tecnológico y clúster", además de que "todas las personas en Anfaco trabajan para un mismo objetivo, que es asegurar la competitividad del sector”, precisa.
Cuentan con tres grandes vías de entrada de ingresos: los servicios a las empresas; consultoría 360 con soluciones innovadoras; y subvenciones en concurrencia competitiva en concursos nacionales, autonómicos y europeos.
Destaca Roberto Alonso el trabajo en el proyecto Cervera del CDTI (Centro para el Desarrollo Tecnológico y la Innovación), donde Anfaco y el Cytma participan con tecnologías ómicas para diseñar productos alimentarios personalizados. “La nutrición personalizada va a venir. Es más, se está hablando de categorizar nuestro microbioma, segmentado poblacionalmente, y te van a dar las dietas adaptadas. Las tecnologías ómicas nos permiten ver cómo interacciona el alimento con nuestro organismo, con las rutas metabólicas. Así, te van a dar dietas avanzadas. Es un cambio en la nutrición humana y se abre un campo que no existía”, explica. Esta nueva nutrición será clave, por ejemplo, para personas con alergias, intolerancias o un determinado tipo de dieta, para que puedan tener todos los nutrientes que necesitan.
En este sentido, una de las áreas de trabajo del Cytma es la visión hiperespectral y la fotónica. “La alimentación también tiene ingeniería y con la visión hiperespectral podemos saber el porcentaje de grasa o de humedad de un producto, que es importante si quieres que tus productos sean de una calidad homogénea”, señala Roberto Alonso.
También trabajan en el Cytma en buscar salidas a subproductos de la pesca. “Este sector lleva haciendo economía circular toda la vida. Todo lo que sobraba iba a harinas de pescado. Ahora hay una gran tecnificación y conocimiento para desarrollar aplicaciones para que las empresas conviertan sus subproductos en productos de alto valor, tanto en alimentación animal, como en nutracéutica o aplicaciones cosméticas”, subraya.
Otro campo de trabajo es la creación de nuevas proteínas. “Ahí estamos trabajando mucho con fomentar los sistemas alimentarios circulares y sostenibles, porque muchas veces estamos buscando proteínas alternativas, insectos o de ámbito vegetal de calidad inferior y se desperdicia subproducto pesquero, que es una fuente de proteína muy importante. Proponemos recuperar esa proteína”, señala.
Desde Cytma también ayudan a las empresas en las presentaciones o técnicas de conservación. “Tenemos equipos de altas presiones, de ultrasonidos de calentamiento ómico y de radiofrecuencia. Porque hay que adaptar el producto a lo que pide el mercado y eso implica un control de proceso estricto y técnicas de conservación optimizadas. Ya no hablamos solo de frío o calor”.
Asimismo desarrollan nuevas plataformas de vigilancia de riesgos emergentes.
Entre sus retos está “impulsar la colaboración entre universidades y centros tecnológicos. Creemos que ese es el futuro y Galicia tiene un potencial enorme. Tenemos que ordenar el ecosistema”, sostiene Roberto Alonso.
Sólo en 2024, Cytma gestionó 70 proyectos de I+D+i que movilizaron más de 107 millones, con socios de 21 países y más de 470 clientes. De estos proyectos, el 60% fueron desarrollados en contrato directo con empresas del sector. Cada día de 2024 realizó 400 análisis de alimentos, un total de 138.000. Y esto es sólo una parte de su actividad.
En 2025 prevé superar los 8 millones de presupuesto y llegar a 500 empresas.
“Estudiamos el cultivo de macroalgas en acuicultura”
Al frente del área de acuicultura del Cytma está Martiña Ferreira, que explica que “la investigación más puntera ”es la producción de microalgas para alimentación de bivalvos y también para convertir en piensos para pescados. En humanos tienen aplicación, por ejemplo en salud y en cosméticos e incluso para alimentación", precisa. Otro proyecto es la producción de simiente de mejillón en criaderos, “pero en este asunto la clave está en la reducción de los costes, que de momento son elevados”.
También trabajan en la iluminación, un asunto clave en las granjas. Y otra línea es el cultivo de macroalgas, “ que podría suponer una diversificación para la acuicultura, porque se trata de un producto muy valorado en Asia, que utilizan para espesantes, industria alimentaria, cosmética e incluso para el textil”.
“Con las algas de arribazón se pueden hacer piensos”
David Alonso es el responsable de los equipos de fermentación y de valorización dentro del centro de investigación de Anfaco. “El objetivo es aprovechar los subproductos industriales, considerados residuos, para darles una nueva vida mediante procesos de valorización”, explica.
En este caso se encuentran “las algas de arribazón, que llegan a las playas, y que mediante la hidrólisis se pueden inroducir en las dietas de alevines, incluido en los piensos”, señala.
Otro proyecto es con los residuos de atún, “que tienen propiedades antihipertensivas”. También con biomasa para el desarrollo de proteína. “Trabajamos en la segunda vida de productos que no tienen valor inicialmente para transformarlos en productos para el mercado”, apunta.
“Entre los objetivos está el anticiparse a toxinas emergentes”
Virginia González y Sandra Ulla son las responsables de la Unidad de Técnicas Cromatográficas. El Cytma de Anfaco tiene el único laboratorio privado para biotoxinas acreditado por la ENAC (Entidad Nacional de Acreditación) para los tres tipos de biotoxinas (amnésicas, paralizantes y lipofílicas), así como para las emergentes. Presta servicio tanto a la industria como a otras comunidades autónomas españolas que carecen de este servicio. “En Galicia hay una gran capacidad cienítifica en este campo”, aseguran. Sólo el año pasado se analizaron 27.000 muestras. El servicio para la industria tiene entre sus objetivos “anticiparse en toxinas emergentes y también adaptarse en tecnologías adaptar alimentación a las necesidades de los consumidores, para valorizar la proteína del pescado y las algas a través de la aplicación de técnicas cromatográficas”, explican. De esta forma “se puede obtener una alimentación dirigida y adaptada al consumidor y mejorada con las ciencias ómicas. Es un nuevo campo de investigación en el que todos los datos biológicos obtenidos a partir de estudios, incluyendo la genómica, transcriptómica y proteómica están recogidos, integrados y analizados para descifrar la naturaleza biológica de los organismos vivos”.
“Con visión artificial monitorizamos la calidad”
Juan Luis Guede es el responsable de visión hiperespectral. Explica que uno de los proyectos del centro de investigación de Anfaco, Cytma, es “la aplicación de la ingeniería de automatización para medir parámetros, por ejemplo mediante visión artificial monitorizar la calidad de alimentos para poder mejorar su rendimiento”.
Esto es lo que hacen las cámaras hiperespectrales con las que cuenta el centro de investigación de la asociación Anfaco.
“Ofrecen más información que una cámara de un móvil, 200 veces más información”, precisa, para añadir que “también se puede utilizar para temas de fraude”, aunque en Cytma “se utiliza para medir parámetros físico-químicos de los alimentos” y apoyar a las empresas con sus resultados, explica.
“Traemos la biomedicina al sector alimentario”
Montserrat Espiñeira y Celina Costas son las responsables del área de biología molecular y biotecnología. “Somos pioneros trayendo herramientas de biomedicina al sector alimentario para ofrecer más valor añadido”, explican. No sólo se trata de que el producto sepa mejor, sino de qué aporta. “Somos los que comemos y la medicina y la alimentación están cada vez más próximos. Así que nosotros aportamos datos científicos a la industria para certificar que lo que están haciendo tiene efectos sobre la salud”, asegura. Y además certificados por ENAC. Pero es que además sus análisis son “casi inmediatos, las muestras llegan a las 8 de la mañana y a las 11 la empresa tiene los resultados”. Analizan los alimentos peor también los procesos de limpieza de las instalaciones.